Hilary.
Cuando abro los ojos me doy cuenta de que estoy en mi habitación y no en el bosque. Mi playera esta empapada de sudor y mi corazón palpita como si hubiera corrido kilómetros.
Por un momento me pareció real, como todas las veces que trato de dormir, más no lo consigo. No importa si es de día o de noche las pesadillas y la culpa me persiguen.
Al fin había podido conciliar el sueño pero sus gritos de auxilio me hacen imposible seguir haciéndolo.
Siempre es lo mismo. Me encuentro en el bosque y cuando hallo la jaula, la pequeña ya no está y enseguida el bosque se inunda con sus gritos pidiéndome que la salve, que les diga que no les haga daño.
Aun no sé qué le hicieron a su cuerpo, es probable que nunca lo sepa por qué nadie me lo va a decir si pregunto.
Todos creen que estoy demente, que imagino cosas, pero sé que me mienten, como si trataran de proteger algo. Solo espero que su entierro haya sido algo digno. Ojala algún día tenga la oportunidad de visitar su tumba.
Esta situación me está volviendo loca, no puedo dormir y los entrenamientos me están dejando exhausta. Mi cara luce horrible, tengo unas enormes bolsas debajo de mis ojos.
Ni siquiera las duchas me ayudan a relajarme.
Después de mi intento fallido de escape, estoy más vigilada. A cualquier lugar que quiera ir tengo que cargar con una niñera. Estoy segura de que Zayn fue quien me delató.
Me siento hostigada, pero de cierta forma me lo gané. Si antes confiaban en mí ahora no lo hacen. Aunque no tengo ningún plan de escapar, por el momento.
El martes, Zayn casi me llevó arrastrando al entrenamiento. Ahí, Louis nos informó que íbamos a llevar un entrenamiento extra por las tardes en la cual nuestro entrenador seria nuestro cuidador y nos enseñaría estrategias de defensa personal, lo cual serviría para la prueba semanal.
Al principio la idea me emocionó, ese día tenía unas ganas de estrellar mi puño contra su cara mientras hablaba. Ni si quiera su arma me intimidaba, lo que no sabía era cómo hacerlo sin que lo esquivara.
Según mi reloj de mesa aún falta para mi entrenamiento de hoy con Zayn.
Antes de salir de mi habitación, doblo la ropa limpia del cesto y la guardo. Ayer que regrese de la lavandería me dio pereza ponerla en su lugar.
Todo ahí era muy tranquilo, parecía como si estuvieras en cualquier lavandería. Todos llevaban ropa normal y no uniformes incomodos. Incluso yo me sentía bien usando la poca ropa que había podido traer conmigo. Parecíamos chicos normales de universidad.
Cuando salgo al pasillo Niall está parado en mi puerta, al parecer esta tarde cubriría a Zayn, según lo que me dijo.
—¿Qué necesitas, Hilary? —pregunta Niall entonces.
—Quiero ir a la cocina por un sándwich y después quiero ver la televisión un rato, ¿Me puedes acompañar?
—Esta bien, vamos.
Comenzamos a recorrer los pasillos de la mansión para poder llegar a la cocina.
El lugar estaba desierto mientras yo sacaba los ingredientes del refrigerador y la despensa para mi aperitivo. Niall solo se quedó parado en el umbral de la puerta vigilándome. No lo hacía como la primera vez que nos conocíamos, lo hacía como si analizara mis movimientos o tal vez solo estaba ausente.
No sé qué les pasa a todos los sujetos que viven en esta residencia. Siempre están como estatuas sin poder tomar un descanso, observando cuidadosamente el lugar en donde están como si alguien pudiera atacarlos. No dudo que no duerman o si duermen, lo hagan con un ojo abierto. Es increíble que puedan estar como si nada con la vida agotadora que llevan.

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EPIC
Fiksi Penggemar"One Direction para el mundo, agentes secretos solo para algunos"