Las deciciones del Señor Jeon se ven afectadas por la imprudencia del joven Kim cuando una tarde por casualidad este decide coquetearle descaradamente.
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Comediante Febrero 28, 2014
Un suspiro entrecortado se perdió entre el viento frío que se colaba por la ventana sacudiendo unas cortinas celestes muy llamativas para cualquiera que las viera, el castaño miro alrededor un poco perdido entre la hora que realmente era.—¡Taehyungie! ¿Ya despertaste?— El castaño bufo un poco al escuchar a alguien llamarlo desde el piso de abajo, se acurrucó un poco más de tiempo en la cobija deseando quedarse ahí todo el día.
—¿Taehyungie? Deberías comer un poco de hot cakes antes de que comencemos el día. — No tuvo más remedio que estirarse en la cama para terminar de despertarse cuando los llamados no cesaron ni un poco, sin responder a ninguno de estos metió los pies a sus pantuflas para dirigirse al baño sin pensarlo dos veces en tomar una ducha
¿comer un poco de hot cakes? Primero se rajaba la garganta.
Su baño fue rápido, a pesar de estar lejos la costumbre de bañarse rápido cuando vivía con su mamá se le quedó, y aunque llevaba poco tiempo de haber llegado a la ciudad de su abuelo de todas formas no quería sentirse un invitado. Se baño rápido y sin perder tiempo, cuando terminó aplicó aceites, cremas y bloqueador solar a su rostro, ya tenía las mejillas lo suficientemente rojas por haber estado todo el día ayudando a su abuelo con sus rosas.
Bajo las escaleras en silencio, con un short de mezclilla que había hurgado de la sección femenina en una tienda del aeropuerto cuando llegó, una camisa larga que le cubría parte superior del short, brinco los últimos escalones y se asomo a la cocina mostrando apenas sus ojos y sonrió cuando no notó la presencia de nadie ahí, se acercó al plato ya servido y partió una gran parte de los dos hot cakes, los envolvió en una servilleta antes de tirarlos al cesto.
Camino hacia la entrada principal la cual estaba abierta completamente saliendo cuando los rayos del sol le pegaron en el rostro, miro a su abuelo con medio cuerpo metido en el cofre de un carro que llevaba reparando 3 años, ajusto las llantas de patín en sus tenis blancos antes de dejarse caer a la acera.
—Abuelo, ¿cómo vas con el auto? —El anciano levantó su rostro con una sonrisa al castaño, animado de que le hayan preguntado.
—Bien, creo que ya pronto podremos ir a dar un paseo. —Taehyung le sonrió, su abuelo siempre le decía lo mismo, dio unas cuantas vueltas sobre su eje disfrutando de sus patines.
—Abuelo, ¿qué hora es? —El de cabellos blancos echo la cabeza atrás con una risa.
—Hoy despertaste más temprano, son las ocho con cuarenta y cinco de la mañana. —El castaño bufó rodando los ojos, solo veinte minutos antes que ayer. —¿Almorzaste?
Taehyung decidió hacerlo feliz, por ello, asintió. —No lo terminé, pero algo es algo, ¿no? —Su abuelo le miro con reproche, pero termino ofreciéndole una sonrisa asintiendo, el castaño tomo el camino libre de la amplia calle para dar unas vueltas en sus patines, y tomo velocidad en dirección al final de la calle, le tomo unos cuantos minutos regresar con éxito a la casa de su abuelo.
