PARTE VEINTIDÓS

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Iliana

(…)
-Entonces, ¿qué debemos hacer? - pregunté, mi voz temblorosa con la anticipación del peligro que se avecinaba.
Ossaion nos miró con seriedad, sus ojos azules brillando con una determinación feroz.

-Debemos unir nuestras fuerzas y enfrentar esta amenaza juntos.- declaró. -Solo trabajando en equipo y confiando en nuestras habilidades podremos esperar tener alguna posibilidad de éxito contra los Arcturiens, y asi recuperar a mi hermana.
Asentimos en silencio, conscientes de la difícil tarea que teníamos por delante.
Con la revelación sobre los Arcturiens resonando en nuestras mentes, nos sumergimos en una discusión acalorada sobre los pasos a seguir.
Rhys, Khaos, Ossaion, y yo nos sentamos en círculo, rodeados por el susurro del viento y la inminente oscuridad de la noche, mientras debatíamos sobre estrategias y posibilidades.

-Debemos estar preparados para la batalla-, afirmó Rhys con firmeza, su voz resonando con determinación. -No podemos permitir que los Arcturiens avancen.

-Estoy de acuerdo-, intervino Khaos, su mandíbula tensa con determinación. -Pero también debemos estar atentos a cualquier movimiento que hagan. No sabemos cuándo podrían atacar. La barrera aguantara pero no lo suficiente.
Ossaion asintió en silencio, sus ojos azules fijos en mi , como si estuviera contemplando un futuro incierto.

-La vigilancia será clave-, agregó.

-Debemos mantenernos alerta y listos para actuar en cualquier momento, sin descuidar a las hembras.
Nos sumergimos en un debate acalorado, discutiendo estrategias de defensa y posibles puntos débiles en las defensas enemigas. Cada uno de nosotros aportaba sus habilidades y conocimientos únicos, buscando una forma de contrarrestar la amenaza que se cernía sobre nosotros.
Pero incluso en medio de la tensión y la incertidumbre, también había espacio para momentos de camaradería y complicidad. Entre conversaciones sobre estrategia y planificación, compartimos risas y recuerdos, recordando tiempos más simples antes de que la sombra de los Arcturiens oscureciera nuestros horizontes.
El enfrentamiento entre Rhysand, Khaos y  Ossaion era inminente, la tensión entre ellos cortaba el aire como un cuchillo afilado.

-Deberíamos centrarnos en la amenaza que se avecina en lugar de pelear entre nosotros.-, sugeri.

Rhys asintió con gesto adusto, pero sus ojos todavía brillaban con la furia apenas contenida.

-Tienes razón, solecito, admitió con renuencia, su mirada fija en Ossaion. -Pero no puedo ignorar la falta de respeto hacia el lazo de apareamiento de nosotros.
Ossaion permaneció en silencio por un momento, sus ojos azules oscuros mientras contemplaba la seriedad en la expresión de Rhys.

-Ella es libre de elegir mas machos.- dijo, su voz suavizándose ligeramente.
El gesto de mis machos de endurecio.
-Ella ya tiene su lazo de apareamiento, no necesita mas machos.
Antes de que ellos continuaran discutiendo hable.

-Debemos estar unidos si queremos enfrentar a los Arcturiens.-, intervine, tratando de desviar la conversación hacia un terreno más práctico. Nuestra fuerza radica en nuestra unidad.
Mis palabras parecieron resonar en el silencio, recordándonos la importancia de dejar de lado nuestras diferencias y unirnos en la lucha contra el enemigo común que amenazaba nuestros mundos. Aunque las tensiones entre nosotros aún persistían, estábamos determinados a superarlas en aras de un bien mayor.
En medio de la tensión que envolvía nuestra conversación, las palabras fluyeron entre nosotros como un río caudaloso en busca de un curso claro.
Rhysand, con su mirada intensa y su voz grave, rompió el silencio con determinación.

-Debemos coordinar nuestros esfuerzos y prepararnos para la batalla.- dijo, su tono resonando con autoridad. -Los Arcturiens son una amenaza que no podemos subestimar.
Khaos asintió con gesto serio, sus ojos brillando con una intensidad ardiente.
-Estoy de acuerdo. Necesitamos fortalecer nuestras defensas y asegurarnos de que estemos listos para enfrentar cualquier cosa que se nos presente-.
Ossaion permaneció en silencio por un momento, su mirada perdida en la distancia mientras contemplaba nuestras palabras con una seriedad inusual. Finalmente, levantó la mirada, una chispa de determinación brillando en sus ojos azules.
-Estoy de acuerdo con ustedes-, dijo con voz tranquila pero firme. - pero ella también es la meva femella. ( ella también es mi hembra) - Hablo Ossaion causando un tic en el ojo de Rhysand.
Hable rápidamente.

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