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Los días habían pasado y tanto su tortura como su fracaso en el ministerio estaban cobrando factura no solo a su cuerpo si no a su psique; sus huesos estaban tan débiles y sus articulaciones tan dolidas que estas le impedían realizar correctamente sus misiones; Voldemort recientemente le encargaba misiones mas importantes de entre las cuales la mayoría debía realizar sólo pues bajo la lógica de su maestro por algo era 01 y bueno, su incapacidad le impedía reaccionar rápido la mayor parte del tiempo así que terminaba igual o mas lastimado además de que al estar temporalmente en la mira de el señor tenebroso sus misiones eran casi todos los días y eran bastante complicadas, cada fallo y cada error significaba un nuevo castigo que no podía darse el lujo de recibir.

A estas alturas la orden ya sabia que trabajaba con ellos así que no debía preocuparse por seguir dependiendo de los mocosos donde iba incluida Hermione, eso era tanto bueno como malo.


Por otra parte su mente estaba tan afectada por todos los sucesos anteriores que en sus momentos de debilidad sus fuertes barreras de oclumancia no podían mantener lejos, lidiaba con la constante culpa del pasado que junto con el había quedado en pausa y que de momentos llegaba como una enorme avalancha, el constante choque de sus antiguos ideales que comenzaban a romperse por todo lo vivido estos meses, su ascenso como 01 que fuera de ser algo bueno era una constante tortura al darse cuenta de que el dolor muchas veces era nulo a menos que estuviera muriéndose o que este involucrara una tortura del mismo Voldemort y por último la muerte de su hermano que lo hacia sentirse tan culpable como solo.

Odiaba ser Regulus Black mas que nunca.


Sus ideales se habían visto afectados desde la ultima vez, siempre creció con la idea de que estos eran correctos y hasta hace poco seguía creyendo que así era; sin embargo el día que Sirius murió y el día que encontró consuelo en los brazos de la sangre sucia todo cambio para él.

Primeramente se cuestiono si en verdad había hecho bien al haberse quedado callado todas las veces que Sirius era reprendido por sus padres; siempre lo justifico diciendo que solo tenia miedo de que su padre y madre lo mirasen con la misma decepción y rencor, pero ¿hubiera cambiado algo? ¿y si ese día se hubiera marchado con Sirius? ¿pudieran haber arreglado sus lazos rotos y vivir felices, apoyándose mutuamente, como buenos hermanos? ¿Su vida pudo ser diferente si hubiese seguido a su hermano en lugar de empeñarse en tomar su lugar y seguir el camino que sus padres querían? ¿su vida hubiera sido feliz o mínimamente buena?


Después se cuestiono su relación con la bruja sangre sucia, al principio sentía absoluta indiferencia, de vez en cuando repulsión y rechazo hacia la chica pero con la intervención de Kreacher mas de una vez esta aversión paso a ser simple indiferencia; en algún punto su opinión sobre que la castaña no era más que una sangre sucia sabelotodo, irritante, bipolar, hipócrita y mentirosa había cambiado tal vez al verse reflejado en ella y para cuando se dio cuenta aquel día vio en ella un extraño consuelo que no había tenido de nadie en particular, uno muy diferente al que le daba Sirius en su momento, Severus o Kreacher pero no sabia como llamarlo y tampoco quería comerse la cabeza con ello.

Seguro sus padres se estaban revolcando en su tumba al saber que su perfecto hijo no veía con repulsión a una sangre sucia y hasta le agradaba un poco y Sirius estaría regodeandose burlándose de sus padres.


Hablando de ella, la joven bruja se había empeñado mucho en mandarle pociones curativas desde Hogwarts hasta Grimmauld Place; las cuales se le hicieron muy sospechosas al ver a su elfo sacar libros de la biblioteca Black y llevarlos con la chica sin embargo tenia ya mucho en la cabeza como para preocuparse por esos dos; además estaba convencido de que si estas no fueran seguras Kreacher no se las haría llegar, no lo envenenarian, ¿Cierto?

𝙏𝙝𝙚 𝘿𝙞𝙨𝙡𝙤𝙮𝙖𝙡𝙩𝙮 𖥉 𝙍𝙚𝙜𝙪𝙡𝙪𝙨 𝘼𝙧𝙘𝙩𝙪𝙧𝙪𝙨 𝘽𝙡𝙖𝙘𝙠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora