EUPHORIA - JEON JUNGKOOK [MONOCHROME THREE]

011

Su-mi había salido de una larga ducha, disfrutando de la privacidad que le traía quedarse en la habitación de Jungkook, era riesgoso, si, pero cada día le daba menos importancia.

La banda estaba haciendo la prueba de sonido en el escenario, sabía bien que su novio no volvería hasta un poco tarde, por lo que se había decidido a darle una oportunidad a su música, ya que no lo había hecho antes.

Su-mi creía no ser fan del pop, era una particularidad suya que provocaba constantes discusiones con su mejor amigo, tenía que abrir la mente.

Pasó de una canción a otra, bailando acostada en la cama, hasta que su reproducción al azar se decidió por "Butterfly", Su-mi miró su teléfono ante el cambio de ritmo brusco, queriendo confirmar que se trataba de ellos, y al ser así miró al techo, reflexionando un poco mientras escuchaba la letra.

Se sintió confortada por las palabras, sus ojos llenándose de lágrimas ante la realización, claro que esos jóvenes ídolos habían pasado por mucho.

Sabía la historia de Bangtan, llegar a la cima no había sido fácil para ellos, pero nunca había imaginado a su novio, una de las personas más alegres que había conocido sufrir, pero toda esa letra la hizo pensar que era solo un niño cuando todo estaba sucediendo, lo que hizo llorar aún más.

La puerta se abrió, ella no se dio cuenta.

—¿Noona? —Jungkook llamó preocupado, lanzándosele encima.

—Kook, estás aquí —trató de limpiarse el rostro, pero él le sujetó la barbilla deteniéndola y encargándose él mismo.

—¿Qué pasó, princesa?

—Me gustó Butterfly.

—¿Y por eso lloras?

Ella asintió.

—Estoy en mis días —trató de justificarse, Jungkook rio besándole la punta de la nariz, abrazándola.

—Aquí estoy, no pasa nada.

—Es que... ¿Para quién era esa canción?

—Para nosotros mismos y para army —no necesitó pensarlo, la respuesta era bastante simple. Ella sollozó ocultándose entre sus brazos, Jungkook no pudo evitar reír —Kim Su-mi, estoy bien, te lo prometo.

—¿De verdad lo prometes?

—De verdad —rio —No sabía que podías actuar tan tierna, noona, no tienes que preocuparte por mi, mientras me consientas estaré bien, así que no dejes de hacerlo ¿Eh?

—¿Te estás aprovechando de mí?

—Un poco, quieres que sea muy feliz ¿No? ¿Y si somos muy felices juntos y cuidamos de nuestras emociones?

Ella asintió.

—Eso suena bien.

—¿Qué te gustaría hacer hoy? —entendía si quería estar en cama por el resto del día.

—Me gustaría ver un poco de la ciudad, pero sé que no podemos hacer eso.

—Da tiempo.

—Es riesgoso, ya estamos jugando mucho con nuestra privacidad.

—¿Qué importa?

—No lo sé, creo que no lo hace, digo, todo el equipo de maquillaje tiene una idea, me la paso mucho en otra parte... otra parte bien podría ser donde el chico bonito que no para de coquetearme.

—Me dijiste que actuará normal.

—Lo sé, no te pido que te detengas.

—¿Entonces?