Simon
8 de diciembre, 2028
Observo a mi Lichi tejiendo lo que parece ser una bufanda, ha estado así desde temprano, hoy falté a la única clase que tenía porque Rose me pidió de favor que me quedara con mi abuela para que ella pudiera ir a ver a su mamá, al parecer estuvo enferma y quería visitarla, me fue imposible negarme. Respecto a mi encuentro para escribir con Harmony, le pregunté si sería posible que viniera para tener la reunión aquí ya que no podría encontrarme con ella por la mañana, tal y como tenemos establecido. Su respuesta fue un escueto "Vale", acompañado por un "Envíame la dirección". No pidió mayor información, tampoco fue quejumbrosa al respecto, imagino que los favores se pagan entre sí.
—Lichi, ¿quieres comer ya? —pregunto por quinta vez en la noche y su respuesta vuelve a ser que no.
Me preocupa, mentiría si digo que no; sin embargo, no me atrevo a insistir por miedo a inquietarla, ha estado tranquila todo el día y no quiero arruinarlo. Reviso mi teléfono, he estado esperando una respuesta de Dylan desde hace una hora que fue cuando le pregunté si estaba interesado en dejar la residencia. Sería genial tenerlo como compañero de piso, lo conozco, confío en él y, lo más importante, compartimos ciertas formas de pensar, tengo la certeza de que no tendré las mismas diferencias que con el rubio del otro día.
Tocan la puerta haciéndome alzar la vista del teléfono.
—¿Andrew, puedes abrir?
—Sí, mamá —me pongo de pie y me apresuro a ir, no puedo tardar.
Una Kiara abrigada en exceso me mira del otro lado del umbral. Sonrío, parece un oso con tantas capas de ropa.
—Sí, sí, muy gracioso, ¿puedes moverte? Hace frío aquí afuera.
Me rio y la dejo pasar. Empieza a quitarse la bufanda, el gorro, los guantes y demás conforme ingresamos hasta llegar a la sala, donde escribiremos de modo que puedo seguir echándole un ojo a mi abuela.
Hay una mueca de hastío en su rostro, pero esta desaparece en cuanto ve a mi Lichi sentada en el sofá, las facciones se le ablandan y una pequeña sonrisa se dibuja en sus labios.
—Buenas noches —saluda.
Mi abuela no le responde, está enfrascada en su actividad, consigo notar algo de tristeza en la mirada de Kiara y me apresuro a su lado.
» ¿También le hablaste mal de mí? —indaga en un susurro.
Niego.
—No lo tomes personal, por ratos se desconecta —le explico—. Tiene alzhéimer así que no te sorprendas si no me reconoce o si me llama Andrew.
Trago duro porque decirlo en voz alta es más complicado que solo pensarlo. Kiara parece notarlo porque posa una de sus pequeñas manos sobre mi antebrazo, de algún modo me reconforta. No dice nada, solo me da un apretón antes de liberar el agarre.
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ENTRE CORAZONES Y LETRAS © [TERMINADA]
RomanceKiara Harmony ha crecido bajo la sombra de su hermana mayor desde que tiene uso de razón. Quiere sobresalir, quiere que la conozcan por quién es y no por ser la hermana pequeña de la maravillosa Adara Harmony. La universidad es su oportunidad perfec...