CAPITULO 13

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SHIRLEY

Hoy me dirijo al cuartel general, para una reunión de urgencia a la que asistirán todos los altos cargos del ejército. Al llegar  nos sentamos todos en una mesa en forma de U, en el medio de la mesa esta sentado mi hermano Lucian,  mi padre el comandante esta de pie en el otro extremo de la mesa, detrás suyo hay un mapa de nuestro mundo, a cada lado de la mesa están todos los tenientes y a cada lado de este está su sargento, el segundo al mando en ausencia del Teniente, a mi lado se encuentra Damian, lo nombre sargento nada más unirme al pelotón ya que al ser el más antiguo de este era lo más sensato ponerlo como sargento.  Hoy la reunión se debe a que a sido localizado un grupo criminal que se dedica a la trata de blancas, por si no lo sabéis la trata de blancas es la compra venta de personas ya sean humanos, hombres bestia, hombres lagarto...., al parecer alguien se está dedicando a secuestrar gente y venderla por micho dinero, los reyes gemelos bestia han solicitado nuestra ayuda y estamos ideando un plan para capturados.

El Rey empezó a declarar cual seria la misión.

- como ya sabéis los reyes gemelos bestia han solicitado nuestra ayuda para capturar a estos criminales, por ahora no sabemos que aspecto tienen ni nada parecido, pero... aquí es donde entramos nosotros, el pelotón de combate se infiltrara como posibles esclavos para desmantelar su Red de tráfico de personas, por la información que tenemos su modus operandis es secuestrar gente de los barrios más pobres de las ciudades principales, mayormente a gente que no tiene un hogar, así que en esta misión el pelotón de combate se encargará de esta misión, dado que son los más sigiloso y mejores para la infiltración, la misión se llevará a cabo en los barrios pobres de nuestra ciudad, dado que en el día de ayer se dieron tres reportes de desaparecidos en esa zona,- explicó el rey con rostro serio.

- Teniente Ritter, tu te encargaras de llevar a cabo la misión, llévate a cinco de tus mejores hombres para llevar a cabo la mision, empezarás tu misión al anochecer ya que  es cuando parece ser que actúa esta banda criminal.- declaró el rey mirando a shirley.

- Si señor,- confirme con tres golpes en el pecho a modo de respeto.

- Te harás pasar por indigente, estaréis posicionados en diferentes zonas del pueblo para no ser detectados, en todo momento estareis siendo controlados por tus hombres ocultos en casas Franco, con esto concluyo la reunión ir a preparar vuestros papeles- anunció el rey.

***

Al anochecer ya estábamos todos en nuestros respectivos puestos, yo me encontraba en una calle llena de basura con una manta vieja llena de agujeros y desgastada color gris que me cubría el cuerpo, con zapatos igual de desgastados y tan finos que no daban para abrigar correctamente, me había desordenado el pelo de tal forma que parecía un nido de pájaros mal echo, la cara la tenía sucia y mi olor no era agradable la verdad, ya que me había tirado todo el día corriendo y entrenando para no ir oliendo a rosas en la misión, así parecía más real todo, sabía que no me reconocerán ya que al no tener veinte no me había presentado al pueblo todavía, es una ceremonia donde acude todo el reino para conocer a su princesa.

Pasaba el rato y no había señales de nada, solo borrachos intentando ligar y gente orinando en las calles. En un momento dado vi un hombre demasiado bien vestido como para ser de esta zona, ese hombre pasó por mi lado y le pedí algo de limosna para hacer contacto visual, en ese momento me miró sonrió y hablo con tono grave

- Bonita, no llevo dinero encima ahora mismo pero tengo una oferta mejor que el dinero si te interesa,- susurro aquel hombre, como no quería dejar escapar la oportunidad me metí en mi papel lo mejor que pude.

- pero señor, yo no tengo experiencia ni nada, además no tengo nada bueno que ofrecerle.- susurre con cara triste al hombre.

- No te preocupes por eso, yo te proporcionaré un techo, comida y una cama pero a cambio ven conmigo,- declaró aquel hombre extendiendo su mano hacia mi, mire al hombre asentí con la cabeza y tome su mano.
El hombre me llevó a una casa a las afueras de la ciudad un poco alejado de las miradas curiosas, cuando pase el umbral pude ver que era una casa acogedora a simple vista y vastante humilde, tenía una pequeña cocina antigua de leña y  bien organizada al fondo, en el centro una pequeña mesa con cuatro sillas y un candelabro en el medio como adorno, en el otro extremo de la estancia había un pequeño sofá de dos plazas un poco desgastado pero bien conservado de color azul oscuro, justo detrás de este habían dos puertas, una seguro daba a un baño o algo parecido y la otra a un posible dormitorio. Una vez dentro el hombre me cerró la puerta detrás de nosotros y el pensando que no me di cuenta echo el pestillo a la puerta de forma silenciosa, entonces me habló en tono calmado pero algo nervioso.
- porque no te pegas un baño y te cambias de ropa,- comento el hombre.

SHIRLEY, de humana a vampiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora