Without Love {dylan o'brien}

Capítulo 17

Caminar precisamente no es lo que más me agrada. No soy del tipo de chica que ama los deportes y hacer ejercicio, más bien me encanta comer chocolate y helado acostada mirando películas.

Me dirijo apurada al Instituto, faltan cinco minutos para ingresar y a mi me faltan seis cuadras, lamentablemente tengo que salir de mi zona de confort y correr.

Llego un minuto antes, lo cual agradezco.

Observo a mi derecha a Dylan y a su amigo, que charlan animadamente. Éste último, no me saca la mirada de encima y eso me incomoda. Decido marcharme al salón correspondiente; matemática.

Me siento en mi habitual silla y diviso a Lindsay charlando con una chica rubia de baja estatura.

-Hola -saludo con educación a las dos.

-Kayla, ella es Ashley Lloyd. Ash, ella es Kayla Collins -nos presenta.

Sonrío y vuelvo a mi lugar. No me gusta la mirada de esa chica, me parece perversa. Sacudo la cabeza y dejo de pensar en eso, no hay que juzgar a primera vista. Todavía no la conozco y no debería tener esos feos pensamientos acerca de ella.

Vuelvo a sentarme y aparece Dylan detrás de mi. No se inmuta, si quiera me saluda. Estoy segura de que está enojado.

La profesora comienza con la clase y me limito a guardar silencio, pero no puedo. El tema de Dylan me absorbe, necesito saber que le pasa.

-Pstt Dylan -lo chisto, tratando de llamar su atención. El me mira y me hace una seña de silencio. ¿Qué diablos?

-¿Ahora eres tu el ofendido? -pregunto, enarcando una ceja -¿Intercambiamos papeles?

Él niega con la cabeza cuando escucho una voz lejana. -Señorita Collins, si le gusta conversar hágalo afuera de mi clase -murmura la profesora con enojo.

El sonrojo en mi cara es evidente, me quedo callada y, antes de hablar una persona se adelanta. :-No -alza la voz Dylan -la culpa es mía profesora. Ella no tiene nada que ver.

Abro mi boca con asombro y, antes que pueda replicar, la profesora le ordena que se marche.

¿Acaso Dylan se echó la culpa por mi?

La clase sigue y yo no puedo dejar de pensar en aquel gesto.

Toca el timbre y rápidamente me encamino a la cafetería con Lindsay y Ashley a mi lado. Esta última está desorientada debido a que es nueva en el Instituto.

La pelirroja charla animadamente con ella y no puedo evitar sentir celos. Lindsay es MI mejor amiga desde chica. La chica con los ojos verdes más hermosos, aquella chica que le pegó a un niño por haberme burlado, aquella que siempre me prometió ser amigas hasta el final de nuestros días.

Nosotras dos somos inseparables, siempre estamos las dos solas -además de Austin- y nunca llegó el momento de expandirnos e integrar una nueva chica a nuestro pequeño grupo.

Sacando esos pensamientos de lado, me incorporo a la cafetería y selecciono un muffin y un smoothie de frutilla. Muy "energético" para ser las once y cinco de la mañana.

Cuando quiero pagar, me doy cuenta que no traigo dinero. Recuerdo que lo dejé en mi habitación. Me siento avergonzada y le devuelvo a la señora mi comida cuando una mano se interpone.

-Yo lo pago -carraspea Dylan sacando dinero y entregándoselo.

La señora me entrega mi muffin y smoothie y lo unico que hago es, con confusión llevarlo hacia mi mesa para, posteriormente ir a la mesa de él.

-Gracias Dylan. Por lo de cubrirme con la profesora y comprarme esto. Yo te juro que mañana te traigo el dinero -agradezco.

-No tienes que hacerlo, Kayla. Y no fue nada -acota, dándole un mordizco a su budín.

-Claro que sí -contraataco- sonrojada intento irme, pero su brazo me envuelve la cintura y no me lo permite.

-Almuerza conmigo -propone, con una sonrisa inocente.

-Humm.. está bien -accedo, sólo por esta vez. Además, me da lástima ya que parece que su amigo se cambió de mesa. Tal vez estén peleados.

Dylan señala mi suéter rojo manga larga con la frase "Hate" y dice que es lindo.
¿Será portador del odio? Sonrío y le agradezco.

Al finalizar la charla, tomo mi bolso con mis pertenencias y me marcho apuradamente. El estacionamiento queda con algunos estudiantes mientras yo camino velozmente.

Sigo dos cuadras y doblo a la derecha cuando siento pasos detrás de mi. Sujeto mi bolso fuertemente mientras esos pasos se agilizan.

-Detente -ordena una voz detrás de mi.

Giro lentamente y veo a un joven con su rostro tapado y con un cuchillo en su mano izquierda. El temor se apodera de mi y entro en estado de shock. No sé que hacer, quiero correr pero me va a alcanzar, quiero gritar pero me va a cubrir. Y sin importarme, grito, sabiendo las consecuencias. -¡Ayuda! -mi voz se vuelve más frágil.

El ladrón me toma fuertemente de las manos y me ordena con el cuchillo que me calle. Aterrada, le hago caso.

-Déjala -ordena una voz masculina tomándolo de la camisa y tirándolo al piso.

Dylan toma mi mano y me dice que no la suelte. Corremos rápidamente en ese lugar desolado cuando por fin llegamos al estacionamiento y él me dirige a su auto.

Antes de ingresar en él, abrazo al castaño y lo tomo de sorpresa. Segundos después, me devuelve el abrazo.

-Gracias por todo, Dyl -murmuro en su oído y él se tensa.

-No hay nada que agradecer -dice, abriéndome la puerta de su auto y cerrándola.

Sube él y comienza con el trayecto. Mi corazón sigue agitado por lo sucedido y no puedo estar más agradecida por lo que Dylan hizo por mi. ¿Qué habría pasado si él no aparecía?

Se estaciona enfrente de mi casa y yo me bajo. Pero antes de hacerlo, pronuncio unas palabras: -Te perdono, me demostraste que eres una excelente persona. Lo que hiciste hoy, me dejó anonadada. Gracias por todo, Dyl -le doy un beso en la mejilla mientras él sonríe.

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Espero que les haya gustado el capítulo❤
Quería agradecer a @meelsilva por una idea que me dio para este cap!