Capitulo 17.-

201 21 3
                                    

Nuevamente el pentagrama se abrió expulsando al oso quien cayo de espaldas al suelo, antes de caer alzó sus brazos para evitar que el pequeño se golpeara pues era el oso quien lo lleva, se iba a levantar hasta que escucho los gritos del hechicero quien apareció callendo del cielo.

Callo encima del oso dejándolo sin aire, — hay! Mierda, lo siento spreen!— se disculpo saliendo de encima y sosteniendo al pequeño quien dio una pequeña risa.

Con dificultad hablo, — no te preocupes, estoy bien— declaro recuperando el aire.

—mierda no entiendo cómo aparecimos en el cielo, con suerte pude amortiguar ambas caídas, si no lo hubiera hecho estoy seguro que moriríamos — comento levantándose del suelo y miro al oso, — específicamente tu— se rasco la nuca.

Spreen se frotó el estómago para después levantarse con un poco de dificultad, — esta bien, no te preocupes — miro a sus alrededores, —che, donde estamos?— pregunto, pues lo único que lograba mirar era arena.

El hechicero reaccionó mirando nuevamente el lugar, —hay mierda, bueno era de esperarse no tenemos un lugar de destino exacto por eso es que aparecimos aquí.— confesó tapando al pequeño del sol.

vamos tenemos que buscar un lugar sin tanto sol— dijo el oso levantando unas mochilas.

Por más que caminaron no encontraron nada, spreen se dio cuenta de que el hechicero ya estaba agotado, incluyendo al pequeño que no dejaba de llorar, —juan, hay que descansar estás agotado y el también — comento el oso agarrando al pequeño.

esta bien, déjame aparecer traer el campamento aunque sea— dijo comenzando a recitar un hechizo, pues antes se preparó con un pequeño campamento que con esfuerzo hizo aparecer, nada más que una casa de acampar en la que estarían más cómodos.

El hechicero cayó agotado después de comer y dormir al pequeño a quien le dieron su papilla, el oso se negó a descansar pues sabía de los peligros que habían en ese lugar.

Miro al hechicero dormir realmente se veía agotado, el clima cambio al anochecer dando una brisa fría haciendo temblar al oso quien recordó que con el llevaba la capa del hechicero extrañamente este mismo no se había dado cuenta que no llevaba su increíble capa de hechicero supremo, saco la capa y se la coloco en los hombros, claro está que tenían una fogata pues no podían permitir que el pequeño pase frío.

Ambos se habían preparado en todo para evitar que el pequeño pase peligro, antorchas, comida, luz que hacía que la casa se mantuviera calida y que el hechicero conjuro, algunas sábanas, ropa y todas las cosas del bebé.
El lugar estaba bien iluminado y era imposible que alguien apareciera sabiendo que no habían encontrado nada a kilómetros así que decidió descansar sentándose a un lado de la casa de campar.

Al despertar ambos chicos comieron, dándole de comer al pequeño para después aguardar todo, —bueno abriré un nuevo portal, tal vez podamos aparecer en un nuevo lugar— comento el hechicero

Spreen asintió cargando al bebé y mirando al hechicero, el hechicero ya le había comentado que al estar en un universo que seguramente no esté conectado con los dioses del todo sería un poco más difícil hacer aparecer un portal, por lo tanto está vez evito usar su típica frase "¡dioses del todo, me escuchan?!" .

padres por accidente (spruan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora