Capítulo 19

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CARLA

Estaba esperando a Samuel toda la noche y aún no llega, hace días que lleva metido en el trabajo, no entiendo por qué Christian o su padre no pueden terminar todo y dejarlo en paz de una buena vez.

Eran las dos de la madrugada cuando por fin llega y entra en habitación con una mirada que dice que es demasiado cansado.

-Madre mía, estoy agotado – decía el saltar sobre la cama

Extrañe mucho estar con él, creo que en estas últimas semanas me acostumbre a tenerlo a mi lado todos los días.

-¿Cómo te fue?

-Ya no puedo más, te juro que llevo así toda la semana con este puto trabajo – se queja

Empiece acariciar su pelo tratando a ayudarle a relajarse un poco.

-Tengo una idea – dije muy contenta

-Dime.

-¿Qué dices si tomas toda la semana libre y nos vamos a Oleiros? ¿Recuerdas que tengo una cabaña allí?

-¿Cómo olvidarlo? – sonríe

Cuando éramos adolescentes sabíamos escaparnos allí juntos, entonces éramos amigos, pero me apetecía pasar por lo menos una semana entera junto a él en ese lugar.

-Pasamos toda la noche viendo pelis y cocinando pizza – se ríe

-Bueno, ahora podríamos hacer otras cosas también – susurro en su oído

-¿Cuáles?

Sabía muy bien a lo que me referiría, estar encerrada allí con él toda la semana ahora será mucho mas diferente que antes.

-Lo que quieras – dije

Salte sobre él besándolo en los labios mientras él pone la mano detrás de mi nuca atrayéndome mas hacia él, mi dependencia de Samuel a veces hace olvidarme de Christian, no sé por qué.

SAMUEL

Me apetecía mucho ir con Carla a la cabaña, pero primero tenía que resolver todo relacionado con el trabajo. Marina me llamo de nuevo para asistir a la cena, supongo que no entendía bien cómo funciona el contrato.

-¿A dónde vas? – dice Carla al salir del baño

-Tengo que resolver algún asunto del trabajo.

-¿A estas horas?

Me acerqué a ella, tomándola por la mano, besándole la mano.

-No me tardo, ¿sí?

-¿Por qué Christian no puede hacerlo?

-Joder, no lo sé, pero ella me llamó y bueno necesitamos revisar el contrato de nuevo.

-¿Ella?

Pensé que ya le había hablado sobre Marina, pero parece que no.

-Sí, Marina es una clienta muy importante, su padre es un hombre muy adinerado que quiere relacionarse con nosotros y nuestra empresa.

Ella cruza los brazos, parece que estaba de mal humor.

-¿Qué? – dije

-Nada, solo el hecho de que esa mujer te está llamando a estar horas solo por un contrato, es como si no supiera que estás ocupado.

-Tranquila, volveré dentro de diez minutos y entonces podríamos pasar el resto de la noche en nuestro jacuzzi – dije al susurrar en su oído

Ella sonríe.

-¿Te encanta la idea? – dije

-Me encanta, pero te tienes que apurar, guapo.

Le besé en labios y salí para terminar todo lo antes posible.

Amarte duele - CARMUELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora