La vergüenza empeoraba cada vez más, ya que empezó a entrar a ciegas incluso si intentaban cerrarle la puerta, pero ahora que superó el límite. La furia que se había estado reteniendo durante dos días finalmente, en la mañana del tercer día explotó.
Murray le gritó al hombre que estaba sentado frente a Mika y sonreía como un idiota.
-¿Cuando perdiste la cortesía? ¿Por qué sigues viniendo a las casas de otras personas por la mañana?
-No estoy aquí para verte, así que no te preocupes.
Respondió John, sentado con el codo en la mesa, mirando a Mika, que estaba comiendo la sopa frente a él. Murray dobló el periódico que estaba leyendo y lo tiró sobre la mesa, gritando en voz alta.
-Esta es mi casa, John. Quiero decir, mirar tu cara por la mañana me hace sentir que voy a vomitar. ¡Ni siquiera me pediste permiso para entrar!
Por supuesto, Jhon ignoró las palabras de Murray. Cogió la sopa con una cuchara y se la puso en la boca Mika. Lo mantuvo vigilado sin perderse una sola acción.
¿Cómo puedes mover la boca con tanta delicadeza?Fue hace unos días, pero recordó el momento en que besó esos lindos labios y los dos ojos de John brillaron siniestramente.
-¿Estas sordo?.
Murray, quien estaba genuinamente enojado, dijo mientras se limpiaba las manos. De cualquier manera, John en la mesa, apretó la barbilla y forzó su rostro hacia Mika, quien no lo miró. En el pasado con solo una sonrisa, podía obtener la aprobación o llamar la atención de la gente, le era fácil, con una cara que engaña fácilmente a todos.
Pero no tuvo ningún efecto en Mika, y él siguió evitando su mirada. John como un bebé encogido, espera a que Mika responda. Sonrió y desafortunadamente, la reacción de Mika fue ponerse rojo hasta la punta de las orejas.
-Te dije que te estaría esperando, Mika. Está bien porque soy una persona de mente amplia, puedo esperar. Por cierto, además de esperar, ¿puedo ver tu cara?. ¿Sí? Esa linda cara en la mañana ¿Sabes cuánto tiempo he esperado para verte? Curiosamente, cuando te veo por la mañana, quiero verte de nuevo a la hora del almuerzo y también por la noche. Quiero verte. Quiero verte antes de irme a dormir. Mika, ¿me extrañaste?
La mano de Mika que sostenía la cuchara se detuvo en el aire. Miró a Murray, quien emitió un grito de resentimiento. No es el padre de Mika, así que no puede evitar que entre, pero tampoco puede detener esa boca. A la luz del sol de la mañana, su brillante cabello negro relucía. Con solo mirarlo, se hacía evidente lo guapo que era y además tenía una leve sonrisa en su rostro.
Jhon es tan guapo que cualquiera puede verlo. Aunque no mostraba ningún signo de vergüenza al seguir acosando a Mika que se sentía muy avergonzado y no podía levantar la cabeza.
-¿No vas a comer más? Vamos, come más .
Cada vez que Mika lo miraba, sus ojos se encontraban sin falta. Cada vez que eso sucedía, su corazón latía con fuerza. El Corazón solía doler cuando pensaba en Jhon, pero ahora duele porque se mueve demasiado, no se acostumbraba hasta ahora, no había hecho esto antes. No lo calmó el que estuviera a su lado.
-Quiero seguir viéndote. Eres tan lindo, ¿y si alguien te quiere llevar? Estoy frente a ti así que creo que me hará sentir un poco más tranquilo, si te mantienes a la vista.
Ambas mejillas estaban tan calientes que se sentía como si estuvieran a punto de arder. Mika se mordió el labio. El niño en el estómago lo siente, era raro que se moviera por la mañana, pero hoy se manifestaba. La mirada de Mika con la frente arrugada lo miró.
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HOLA MI CANARIO.
RomanceMika fue acogido por el hijo pequeño de la familia Chestergar, Murray. Mika nació con un problema en las cuerdas vocales y no puede emitir ningún sonido. Sin embargo, gracias a Murray, quién lo aprecia bastante, Mika logra mantener una posición y vi...