Luchó con él moviendo su cuerpo y sus brazos tratando de liberarse de su agarre pero él era más grande y más fuerte. Sin mucho esfuerzo cogió sus muñecas en una sola de sus grandes manos y las puso encima de su cabeza contra la pared.
Con la respira...
Encendió unos cuantos grifos de la gran bañera, unos con agua templada y otros con burbujas de jabón que usualmente escogía, aromas dulces y esencia de vainilla.
Mientras el agua corría, se dirigió a su bolso y sacó el pequeño reproductor de discos de su padre, escogió una de sus canciones preferidas, presionó el botón de reproducir y de pronto, la voz de Nina Simone inundó el baño de prefectos.
—Mmmm...
Hermione cerró los ojos y permitió que la música resonará con su alma. Merlín, cómo necesitaba ésto. Su cuerpo comenzó a moverse lentamente al ritmo del jazz.
Bids flying high, you know how I feel
Sun in the sky, you know how I feel
Breeze driftin' on by, you know how I feel...
Se fue quitando prenda por prenda caminando hacia el gran espejo hasta quedarse desnuda. Miró su reflejo. Se fijó en sus grandes ojos castaños ahora con ojeras, su nariz rodeada de pequeñas pecas, sus labios y mejillas ruborizadas gracias al vapor que el agua caliente generaba en la habitación; su mirada se dirigió al cabello, su gran desafío. Nunca supo qué hacer con él. Había días que lo liberaba sin tener ganas de luchar con él y otros días dónde intentaba domarlo en alguna coleta, trenza o moño. Ese día su cabello había ganado la batalla y rizos incontrolables cubrían su rostro. Bajó la mirada a su cuerpo. Había subido de peso, gracias a Merlín. No le gustó haber estado en los huesos el año anterior. Sus pechos tenían más volumen y sus curvas se veían más definidas.
A veces no podía creer que ya tuviera diecinueve años y que pronto empezaría la vida adulta. La verdad era que debió haber sucedido hacía un año. Sus ojos viajaron al brazo izquierdo, a las dos palabras deformes tajadas en él. Suspiró. Luego su mirada se detuvo en la nueva marca en el cuello, casi a la altura de su hombro. Intentó tocar el sensible punto enrojecido, pero ardió con el simple roce por lo que abandonó la idea. Otra maldita marca en su cuerpo... Odiaba a Malfoy.
Resopló enfadada hacia su reflejo. Elevó la varita para desaparecer la marca y se detuvo. No supo por qué, solo... se detuvo.
Quizás después de bañarse.
Se dio la vuelta y entró en la bañera. Sentir la calidez del agua rodeándola fue como un consuelo para su cuerpo.
It's a new dawn
It's a new day
It's a new life...for me
And I'm feeling good...
Apoyó su cabeza en el borde de la bañera y respiro profundamente.
Tez pálida como el mármol.
Alto.
Su fuerte cuerpo contra el suyo.
Sus grandes manos y largos dedos sobre su piel.
El sabor de sus labios...
Pensamientos sobre él comenzaron a inundar su mente. ¿Por qué tenía que afectarla tanto? Rió en voz baja entretenida de sí misma. Ya no podía engañarse, él siempre había logrado afectarla. Su estúpida lengua viperina y su estupido hermoso rostro y sus estúpidos ojos...
—Esos ojos... —susurró.
Sintió un fuerte tirón hasta el mismo centro de su ser en una oleada de calor que no se debía a la temperatura del agua.
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