El Colmillo en mi Hombro: La Marca || Haikaveh AU || Primera Parte ||TERMINADA||

Capítulo 12: Posesivo

    ~Alhaitham POV~

    ~Continuación del Flashback~

    Después de beber la sangre de Kaveh, me sentí un miserable. Sabía que su cuerpo no tenía tanta sangre ahora mismo, y aún así había decidido hidratarme. Era un monstruo, y no entendía ni siquiera yo por qué podía llegar a ser tan apático. Lo vestí nuevamente y me puse la camiseta, a pesar de estar mojada. Tenía que llevar de regreso a Kaveh.
    Salí con Kaveh en brazos, nadando. Pasar por la cascada fue lo más difícil, pero lo había logrado. Sentía su cuerpo más cálido de lo normal, me preguntaba si tenía fiebre o si simplemente era mi percepción. Aunque también existía la posibilidad de que estuviera caliente por lo que había pasado hacía unos minutos.
    —¡Kaveh! —Sentí como alguien corría hacia mí desesperadamente—. Por los Siete, ¿qué pasó?
    —Lo encontré detrás de la cascada. Parece estar bien, pero no estoy seguro. —Salí del agua con él—. Creo que está un poco caliente, pero no estoy seguro si sea normal.
    —Debemos llevarlo de inmediato a Villa Gandharva, debo comprobar su estado de salud y si empeoró al salir. Sígueme, por favor.
    A pesar de no haber dicho nada, Cyno también iba a lado de Tighnari. Él sólo observaba la situación en silencio mientras Tighnari y yo discutíamos la condición de Kaveh. Los tres nos dirigíamos con algo de prisa hacia Villa Gandharva.
        —No entiendo en qué estaba pensando —dijo Tighnari—. Claramente le dije que no podía salir, pero lo que hizo fue más allá de simplemente salir.
    —No seas tan duro con él, por favor —le pedí—. Está pasando por cosas que a cualquiera le arrancarían el alma. Lo único que necesita ahora es mucho amor.
    Este era el momento perfecto de empezar con la tercera parte de mi plan: convencer a Tighnari y a Cyno de mis sentimientos por Kaveh. Necesitaba que me apoyaran para que Kaveh me amara, para que se atara a mí eternamente. Ellos serían los más difíciles de convencer, pero no era imposible. Tenía que llegar a Kaveh de una forma u otra, pero si la gente que era como familia para él, me ayudaba, sería mucho mejor.
    —Sí, necesita mucho amor. —Tighnari no parecía decirlo feliz, sino molesto, ya que sus palabras eran tan afiladas como una daga—. Pero necesita amor honesto y verdadero, no un amor de ratos que venga, lo ilusione y desaparezca. Y por esto Cyno y yo no nos hemos movido de su lado, porque le daremos mucho amor fraternal.
    —Lamento no haber venido dos días. —Realmente lo lamentaba, porque podría echar para abajo mi plan, y no me gustaba disculparme, pero era por una causa mayor—. No soy tonto, y sé que lo dices por eso, pero no pienso volver a desaparecer. Tuve mucho trabajo, pero aquí me tienes, nuevamente, viendo por Kaveh. Y pienso llevarlo a casa conmigo para protegerlo de todo mal.
    —Alhaitham, ¿te interesa Kaveh? —Cyno abrió la boca por primera vez en todo el rato que habíamos caminado.
    —Creía que era claro que me interesa Kaveh, después de todo, vine a buscarlo y lo estoy ayudando.
    Tenía que empezar mi actuación. Tenía que fingir que no sabía a qué se refería con su pregunta. Si quería convencerlos, tenía que ser yo mismo con un toque de lo que ellos querían que fuera, pero si el cambio era tan repentino, sabrían de inmediato que fingía. Tenía que parecer honesto. Incluso debía parecer sorprendido y sin saber qué sentía. Eso sería lo normal en alguien como yo, y no sólo un cambio milagroso.
    —Creo que no has entendido mi pregunta, así que la reformulo. —Cyno se detuvo en seco, así que todos dejamos de caminar—. ¿Tienes un interés romántico en Kaveh?
    Lo miré como si su pregunta me hubiera tomado por sorpresa. Era obvio que no sentía nada por Kaveh, más allá de un afecto de un amo por su mascota, pero si era honesto, incluso a mí me había sorprendido el afecto y empatía que podía llegar a sentir por él. Tal y como cuando había reído por la conversación de Kaveh y Tighnari.
    —No lo sé —respondí mirando al piso, como si me avergonzara la pregunta—. Nunca he tenido sentimientos románticos hacia alguien, así que se me dificulta saber, pero lo que siento ahora es diferente a lo que siento por ustedes, así que supongo que es algo que apenas empieza.
    —Bien, entonces respondeme esto, ¿besarías a Kaveh? —Quería responder que lo haría dado a que si no, no podría beber su sangre, pero obviamente, eso me llevaría a la quiebra—. ¿Te gustaría besarlo, abrazarlo, acariciarlo y hacerle el amor? ¿Es que acaso piensas en él la mayor parte del tiempo, casi durante todo el día? ¿Quieres sostener su mano mientras caminan porque eso es lo que te produce una felicidad inmensa por dentro? ¿Quieres protegerlo de todo mal y asegurarte de que él jamás sufra?
    —No creo que lo mío sea tan extremo, porque no soy un romántico, pero sí me gustaría besarlo, mucho. —Dejé esbozar una sonrisa, necesitaba que fuera algo tenue, algo que pareciera inconsciente en mí—. Creo que no pienso todo el día en él, pero muchas veces puedo imaginarmelo, y me pregunto cómo está, si estaría bien y si estará comiendo todo lo que le den para que se recupere. Y quiero protegerlo cueste lo que cueste, así tuviera que arrancar una vida con mis propias manos, porque jamás dejaría que nada ni nadie lo toque para hacerle daño.
    Era evidente que mi respuesta los había sorprendido, lo cual agradecí en sobremanera. Mis dotes de actuación eran tan excelentes, que me pregunté si debía pedirle a Nilou trabajo. Ambos se habían comido mi mentira por completo, así que no necesitaba seguir hablando más. Ahora sólo debía esperar.
    —Bien, entonces cuídalo —dijo y seguimos caminando—. Pero también cuida mucho su corazón y sé claro respecto a tus sentimientos siempre.
    —Eso haré.