El vuelo de los dragones - [Charlie Weasley]

Capítulo 11: Reencuentro

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Los días pasaron y Valeria se encontraba estudiando y haciendo deberes como una loca, sumado con los ensayos y las clases a penas tenía tiempo para nada más. De repente, su tranquilidad fue interrumpida por la llegada de dos figuras pelirrojas que se sentaron a cada lado de ella.

—¡Hola, Valeria! —saludó Fred.

—¿No crees que es una lástima estar encerrados aquí con un día tan hermoso afuera? —añadió George.

Valeria levantó la vista de su pergamino y les miró con una ceja alzada.

—¿Y no creéis que es más raro que vosotros dos estéis aquí, en la biblioteca? —respondió Valeria, soltando una risa discreta—. En todo el tiempo que llevo en Hogwarts, no habéis venido aquí ni por casualidad.

—¡Qué concepto tan pobre tienes de nosotros! ¡Nosotros somos los modelos de responsabilidad! —exclamó Fred, fingiendo indignación.

—¿Para que requerís mi humilde presencia, caballeros pelirrojos? —preguntó Valeria con un tono juguetón.

—Queríamos ofrecerte un tour exclusivo por los alrededores del castillo —dijo George.

—Pero, si ya conozco los exteriores del colegio, por si no lo recordáis, el carruaje donde duermo y voy a clase está ahí fuera —dijo Valeria como si fuera algo obvio.

—Sí, pero, ¿conoces el bosque prohibido? —dijo Fred.

Valeria se sorprendió un poco. Sabía que estaba prohibido adentrarse en ese bosque, pero la idea de explorarlo le resultaba tentadora. Sin embargo, no estaba segura de tener tiempo para eso, y además no quería meterse en problemas con su directora.

—¿No se supone que le llaman «prohibido» por algo? —comentó Valeria, mostrando un poco de cautela.

—Sí, pero hay algo que queremos mostrarte. Te aseguramos que valdrá la pena —dijo George, tratando de convencerla.

—De acuerdo, pero si no me gusta lo que veo, seréis mis esclavos durante una semana —propuso Valeria con una sonrisa traviesa.

—Aceptamos, seremos tus esclavos si lo que ves no es lo más maravilloso que has visto en mucho tiempo —dijo George totalmente convencido.