Hold me tight.

capítulo 9.

Desperté con un fuerte dolor de cabeza.

No debí tomar.

Abrí los ojos poco a poco, noté que este no es mi cuarto.
ESPERA, ¡ESTE NO ES MI CUARTO!
Y parece que no he dormido solo.

- Mierda.- Dije asustado.

La chica se volteó dejandome ver su rostro.

¿Ellie que mierda hace aquí?

¿QUÉ HACEMOS LOS DOS EN UN CUARTO DE HOTEL DESNUDOS?

- Por favor dime que no hicimos nada.- Supliqué levantándome de la cama tapándome.

- No seas dramático.- Rió

- ¿QUÉ PASÓ?.- Grité.

- Me trajiste hasta acá.- Sonrió.

- YO NO HICE NADA, y lo mejor será hablar con _____ y explicarle lo que pasó, así se arreglara todo.- Me empece a vestir.

- LO HICISTE.- Gritó

- ¿Como estas segura de eso? No tienes pruebas.- repliqué.

- ¿Ah no?.- alzó una ceja.- Solo un vídeo y varías fotos donde me besas, me tocas y me pides que sea tuya

La he cagado Joder.
Estoy Perdido.

- ME DROGASTE.- Grité.- LE CONTARÉ TODO A _____ Y ASÍ SE ARREGLARA.

- No hagas las cosas más difíciles.- Sonrió maliciosamente.- Ella podría sufrir, POR TU CULPA

- Ella confiará en mi.- Dije casi llorando

- Soy su hermana.- Rió.

- Te recuerdo que ella no te tiene como una hermana.- Reí.

- Si no haces lo qué te digo la haré sufrir y le diré que me violaste.-Se acercó intentando besarme.

- No te atrevas a tocarla.- la aparté.

- No le haré nada, pero a cambio.- Se toco los labios pensativa.- Quiero que seas mi esclavo sexual.

- Estas loca! No lo haré.- dije horrorizado.

- Soy capaz de matarla lentamente para se sufra.- Me miró fijamente a los ojos. Esos ojos que mostraban pura frialdad.

- No lo harías.- Susurré.

- Lo volveré a hacer.-Sonrió.

- ¿Volverlo a hacer?.- la miré incrédulo.

- Si pues me he inventado la historia de que mis padres no nos querían, en realidad los maté.- Dijo con tranquilidad.

- Estas enferma.- Caminé hacía la puerta.

- Si no aceptas, te juro que la mato.- Sentencio.

No quiero eso, no puedo dejar que le hagan daño.

Aceptarlo es difícil, me siento un jodido idiota, pero, ¿Qué puedo hacer? Lo hecho, hecho está.

- NO TE ATREVAS A TOCARLA.- Dije entre dientes.

- Lo harás ¿Si o no?.- Dijo sonriendo.

- No quiero que en publico me toques, me hables, y si puedes no me mires.- Salí de la habitación.

¿Como pude haber aceptado?
No, ¿Como pude tomar tanto y joderme yo solo?

Esa perra arruinara mi relación.
Qué idiota fui.
Esa víbora no se saldrá con la suya, no, no lo hará, no puede hacerlo.