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Zafenat Panea se encuentra en su habitación en compañía de Azeneth que es la encargada de ayudar al omega real, en los primeros días no entendía cómo acomodar los papiros o saber cuál era el que el omega necesitaba pero con el pasar de los días aprendió y también ella era la que explicaba las funciones en el palacio no eran distintas a las de ser el gobernador, todas las noches era invitado a los aposentos reales el soberano podía tener pláticas tranquilas con su omega preguntando si necesitaba algo o si alguien lo molestaba sería castigado pero su omega solo le contaba sobre los planos de los graneros y algunas historias de su pueblo.

-Entonces tu padre peleó con tu dios?... Entonces el pudo ver su rostro- el faraón se encontraba recostado en los muslos de su omega mientras contaba su historia favorita.

-No.. mi padre solo vio su silueta en la oscuridad y al salir los primeros rayos del sol una gran luz ilumina el rostro de dios impidiendo poder mirar su rostro- el menor refleja en sonrisas al compartir historias de su pueblo con el soberano.. con "su Alfa".

-Es una historia fantástica me gustaría conocer a tu padre...quisieras que mandara a mis guardias por el?- el alfa podía ver la tristeza escondida en los ojos de su omega, el menor extrañaba su hogar junto a su familia -Tambien podría mandar a arrestar a tus hermanos por el crimen de venderte- pero el omega junta su frente con el soberano para que este se calmé.

-No deseo ningún mal a mis hermanos aún con lo que pase estoy contento..- alfa no podría creer esas palabras -por que te tengo a mi lado y soy muy feliz- el mayor no puede dejar de ver su sonrisa tan dulce, felicitando un beso en la parte dorsal de su mano sonrojando al menor.

Sin dudas se podría decir que ese afecto que sentían el uno por el otro no pareciera disminuir sino al contrario aumentaba cada día, en una semana el omega volverá a viajar por el alta y bajo egipto a comprobar los cultivos el mismo.

-Tienes que ir..- el soberano no quería que su pareja volviera a viajar recordando como sintió un vacío en su pecho al no tenerlo a su lado.

-Sabe que es mi trabajo como gobernador de egipto el administrar todos los cultivos para los años de hambruna-

Con la esencia del omega real y la sirvienta Azeneth las vivirás podrían moverse libremente por el palacio al pensar que el soberano de las dos coronas tendría la guardia bajá; en el campo de entrenamiento se encontraba el soberano entrenando con Ikeni y su sobrino también se encontraba internado el combate amistoso entre el guardia y su tío.

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Narra Hasani

Desde que el omega soñador se convirtió en parte de nuestra familia el humor del soberano es el mejor antes cualquier cosa podría molestarlo al subir al trono hace poco algunos ministros lo apodaron "El faraón leproso"; según su madre le a contado cuando su tío era más joven constantemente sufría de alguna enfermedad algunos sacerdotes diagnosticaban que principe Tutankamón no viviría más de 21 años pero con tratamiento y súplicas a los dioses éstos respondieron devolviendo su saludo y al actualmente tener 29 años dejo sorprendidos a todos esos sacerdotes que no creyeron en el, convirtiéndolo en alguien reservado que solo podría expresar sentimientos a su familia.

-No baje la guardia su majestad podría costarle la vida- Hasani no supo en qué momento su tío terminó en el suelo con Ikeni apuntando su espada para después extender su mano al soberano.

-Se podría decir que tuviste suerte pero tienes razón; Hasani espero y aprendas mucho entrenando con Ikeni es uno de los mejores guardias- Hasani sabías que el guardia Ikeni y su tío eran muy buenos amigos.

El Omega de Egipto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora