16

758 51 1
                                    

En el Campamento de Jacob se encontraban felices con todas las buenas cosechas que obtuvieron estos años, nunca habían tenido tantos granos de trigo pero también podría deberse a qué aquellas tierras eran de las más fertiles gracias a eso todos los hijos de Jacob estuvieron ocupados incluso el pequeño Benjamin andaba de un lado para otro arreando el ganado de ovejas esas fueron sus nuevas tareas pero no le molestaba al contrario le encantó ser de utilidad para la familia.

Sin duda las angustias terminaron pero no todo fue felicidad también sufrieron la muerte de la primera esposa de Jacob, Lea que murió sus hijos lloraron la pérdida de su madre, Benjamin acompañaba a su padre que se encontraba deprimido al perderla pero con el pasó del tiempo las heridas cicatrizaron..

-Benjamin mira lo que bordé para tí- Dina traía la nueva túnica para Benjamin ya que pronto sería su cumpleaños y tendría que tener ropa más grande para sentirse más cómodo.

-Esta muy bobita, pero no debiste podría ponerme la ropa que ya no ocupan mis sobrinos- el color de los hilos eran sencillos pero el detalle que tenía en cada puntada la hacía especial.

-Como crees Benjamin, mientras yo tenga talento todavía bordaré tu ropa no es necesario que todos los años utilices la ropa que dejan los hijos de nuestros hermanos este año cumplirás 10 y no tienen nada de malo consentirte con este regalo o acaso no te gusta... no está tan feo- A un con todos esos años Dina seguía siendo esa joven que adoraba consentir su hermanito.

-Es un regalo hermoso que usaré con orgullo solo porque tú lo hiciste para mi- sus ojitos demuestran alegría, no tarda mucho en colocarse su nueva túnica y despedirse de Dina para seguir su trabajo pastoreando.

Dina mira como su hermano se aleja el recuerdo de ese día vuelve a ella como si fuera ayer.. cómo José salió del campamento en busca de sus hermanos y tuvo la desgracia de morir en el camino siendo devorado por una bestia.

Su padre se refugiaba en Benjamin cuando algunos días atormentaba la tristeza.. el tenerlo cerca le recordaba el gran amor que tuvieron Raquel y el, Benjamin estaba agusto en la carpa escuchando historias sobre su madre o de su hermano José, el saber que sus hermanos no les gusta hablar de el es muy bien sabido por el menor pero su padre podeia pasar horas y horas hablando de lo buen hijo que fue José.

Lamentablemente este años no fue prospero la sequía está arrasando con todos los cultivos, el río donde recolectan el agua se está secando poco a poco si continua sin llover tal vez no sobrevivan aun cuando el agua está siendo racionada son muchas bocas que necesitan agua y comida.

Los animales comienzan a morirse al no haber pastizales, pero la fé está en ellos o en algunos más que en otro, aún con caminatas en busca de mejores pastizales no logran encontrar nada la tierra está agrietada a faltar de lluvia el sol es más insoportable que nunca, aún con las súplicas y oraciones que Jacob hace a dios parecen no tener respuesta; algunos de los hermanos de Benjamin irán a hebro en busca de conseguir víveres pero al regresar solo traen malas noticias.

-ya casi no hay nada en el mercado la poca miel que nos quedaba la intercambie por muy poco trigo- Judá suspira preocupado eso solo alcanzará para una semana necesitan más.

-y en la siembra la situación es aún peor, no conseguimos mucho de la cosecha- Rubén también informa con seriedad en su voz ninguna noticia es buena.

-Si no se consiguen carne y granos...no sé qué será de nosotros- Simeón también opina -Benjamin, No encontraste pastizales buenos?-

El menor de los hermanos niega y también comenta que las ovejas se están empezando a morir, con la perdida de las ovejas también perderán leche, pero ni siquiera tienen carne en los huesos así que es un desperdicio no pueden siquiera comerlas lo único que pueden hacer es seguir racionando su comida pero si continúan por ese camino terminaran sin tener que comer después.

El Omega de Egipto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora