En vida y en muerte (CHARLASTOR)

Vaggie

¡Hola! Vuelvo con otro capítulo de "En vida y en muerte"... Voy a empezar otra historia... digamos, pero siempre Charlastor. Bueno... ¡Que disfruten!

*Surge la primera temporada"

El hotel había sido un éxito. Nunca pense que Charlie fuera a lograrlo. Siempre pensé que la redención era algo imposible... por que en verdad, ¡tendría que serlo! Todos estabamos confundidos, obviamente. Yo diría que hasta Charlotte se quedó confusa cuando le dieron la noticia de que el hotel había fundionado y que nuestro querido y primer redimidor, Sr Pentious había ascendido al cielo, por haberse sacrificado. 

Vaggie y Charlie estaban muy juntas... algo que por alguna extraña razón me hacía sentir ¿furioso?. Sería por que odiaba a Vaggie. Charlie no salía de su asombro, lo había logrado después de todo. 

El hotel se hizo mejor que antes, y mucho más grande. Habían muchos redimidores ahora. A los impostores los calé temprano, pero los redimidores de verdad pusieron mucho empeño en intentarlo. Todos querían subir al cielo. 

-¡Vaggie! Mi sueño se ha hecho realidad ¡estoy tan feliz!- dijo ella. 

-Charlie, amor, todo el mundo te está viendo, compórtate formal -dijo Vaggie.

-Oh vamos Vaggie, quiero disfrutarlo -dijo Charlie con su cara de perrito mojado. 

-Charlie si quieres hacer eso, hazlo en algún sitio dónde nadie te ve- 

-Charlie querida, ¿qué tal llevas tu inexplicable éxito? -dije yo cortándola.

-Oh Alastor esto es taaaan alucinante- dijo ella con una gran sonrisa. 

-Charlie, deverías celebrarlo, te felicito mucho... la verdad, nunca pensé que lo conseguirías. Eres muy especial princesa -dije para darle un beso en la mano- Nunca pensé que diría esto pero-

-Haber Alastor, aquí no pintas nada, no va a hacer el ridículo delante de todos los redimidores y a parte, tú viniste aquí para ver almas en pena, no para ver como acaban siendo felices. 

-Oh, estimada Vagatha, no me has dejado acabar... sigo aquí por que Charlie me ha demostrado que el redimir pecadores es posible, por lo que esta vez sí, creo mucho en su causa. -dije. 

Charlie me abrazó por detrás y... por primera vez, el tacto ese me encantó. Fué increíble. No muchas veces lo había experimentado. 

-Charlie- dijo Vaggie de regaño- Amor no le gusta NADA que le toquen, ¿verdad Alastor? -dijo intentándo ponerme en compromiso. 

-Siento desilusionarte Charlie, no me suele gustar el tacto, pero ahora mismo no me molesta en absoluto. 

Ella al principio, cuando dije lo de la desilusión dejó de abrazarme para avergonzarse, pero luego me abrazó de nuevo. 

-Alastor GRACIAS, sin tí nunca lo hubieramos conseguido. Tú fuiste quien trajo los primeros trabajadores al hotel, tú hiciste las mejores reformas, tú cuidaste de nosotros, tú nos diste la información, tu nos ayudaste para luchar, tu nos diste ventaja con tu escudo, tú distraístes a Adán. Alastor eres increíble. Muy importante. Me alegra que te vayas a quedar aquí. Pero... si algún día vas a subir al cielo estaré muy triste de tu id-

-Cariño, no te preocupes por eso, yo creo en la redención, pero mi poder y mis asesinatos me condenan aquí. 

-Pero de eso consiste la redención. 

-Charlie, estoy atado a alguien, eso hace que esté en el infierno para siempre, y... nunca te dejaría sola aquí. 

-Yo tampoco lo haré -dijo Vaggie entrometiéndose. 

Total que semanas después Vaggie acudió a las terapias, para poder redimirse, ya que ella no era un demonio, ella era un ángel y no cometio ningún pecado como para pudrirse aquí. 

-Bueno... pues en mi vida no cometí ningún pecado. Yo era general en la guardia civil. La primera mujer del pueblo. Me sentí muy orgullosa. Jamás mate a nadie. Siempre fuí lesbiana. Luego llegué al cielo. Allí viví en paz, pero yo quería que mi vida fuera más divertida por lo que me alisté para los ángles exterminadores y-

-Espera ¿qué? -dijo Charlie con enfado- ¿TÚ QUERÍAS?

-Emmm pues sí. Yo quería divertirme y... -intentó excusarse. 

-Te equivocas... Vaggie. Sí que cometiste pecados, pero una vez muerta. Mataste a muchos de los nuestros ¿por diversión?- dijo ella incrédula. 

-¿Y qué? Alastor también lo hace -dijo ella enfadada de nuevo. 

-Alastor es UN DEMONIO. Los demonios bajan por que cometieron pecados. Tú decidistes hacerlos. No te compares con Alastor. Él, aún que matar sea algo que le guste, es una buena alma. Lo que quiere lo defiende. Eso me gusta mucho de él, y es sincero. 

-¿Y yo que coño soy Charlie? -dijo ella furiosa.-¿Acaso no soy lo demasiado sincera para tí?

-No, lo que tú eres es una maniática furiosa. Deja a Alastor de una vez por todas. - dijo Charlie. 

Lo que ellas no sabían es que yo me encontraba detrás de la pared, oyendo todo. Charlie me estaba defendiendo, eso me gustaba mucho. Vaggie me caía tan mal. Si fuera por mí la habría mandado a la calle pero bien rápido, por su forma de referirse a las personas. Sin respeto alguno. Igual el hecho de ser un ángel le subía el ego. No lo sé, pero todos y cada uno de los que estabamos en el hotel eramos más fuertes que Vaggie, siempre que no llevara su lanza. 

Un día se enfadó de verdad con Charlie, y la dejó. La verdad, yo siempre respeté las parejas homosexuales, pero esta era tóxica, o eso me parecía a mí, yo no era homofóbico. 

Esa misma noche, se redimió. Al parecer eso era la que hacía que no pudiera redimirse, su amor con Charlie. 

Ella subió al cielo sin ni siquiera decirle adiós a Charlie, una cosa horrible y muy irrespetuosa. 

A los días le llegó una carta angelical a Charlie, confirmando el ascenso al cielo de Vaggie. También decía que la polilla salía con alguien allí, con Emily, una serafín con gustos muy parecidos a los de Charlie. ¿Quién lo diría?. Primero de la princesa infernal, y luego con la heredera a la primera serafín. Con Emily fué "feliz". Pobre Emily.... lo que tenga que aguantar. 

La carta destrozó a Charlie, ahí estaba yo, para ella, para darle atención. No dejaría nunca que ese ángel infernal cayera tan pronto. Nunca.