El veredicto

Capítulo 12.

Charles buscaba con desesperación su salón, ya tenía diez minutos de retraso y no quería imaginar el regaño que le darían por llegar tarde. Era el primer día de clases y ya tendría una falta.

Algo completamente inaceptable.

Si su padre, Kimi Räikkönen, se enterara... mejor no pensar en ello.

Además, era su último semestre de universidad, no quería fallar ahora que estaba en las rectas finales, aunque le fue inevitable. Se desveló leyendo el Webtoon de "Cásate con mi esposo" hasta que logró terminarlo.

"Maldita seas, Soomin Jeong".

A lo lejos divisó la espalda de otra persona, que parecía igual de presurosa que él.

—Disculpe —llamó en cuanto lo alcanzó, —¿podría decirme dónde está el aula B18?

—Por supuesto, de hecho, ahí me dirijo, vamos —contestó el hombre, dándole una sonrisa.

"¿Será este mi ser amado?", pensó Charles cautivado por la sonrisa que le regaló el extraño.

Una sonrisa bonita, ojos cafés, hombros anchos, labios gruesos, una cabellera larga y esponjosa que le invitaba a peinarla, al parecer fueron suficientes para derribar todas las barreras de su corazón.

—Muchas gracias —inicia queriendo hacer hablar al hombre y escuchar más de su voz mientras lo sigue por los largos pasillos, —es mi primera vez en esta escuela pues soy de intercambio y estaba completamente perdido.

—¿Entonces debes ser Charles Räikkönen Vettel, verdad?

—Un gusto —extiende la mano, a forma de saludo.

—El placer es mío —contestó, aceptando el saludo con una bella sonrisa, —espero que disfrutes tu estancia aquí, cualquier duda puedes venir a mí.

—Lo tendré en cuenta... —le miró con duda, notando que aún desconocía su nombre.

Carlos notó la confusión y río, su expresión confundida le era adorable y divertida, deteniéndose para abrir las puertas del salón para dejar pasar al joven que esperaba por una respuesta.

Le hace una seña para que pase y Charles sonríe murmurando un agradecimiento mientras entra al aula, sin embargo, vuelve a mirar confundido a Carlos que se posiciona al frente del escritorio de profesores, quien sonríe divertido al ver de nuevo la confusión de Charles. —Buenos días a todos, soy Carlos Sainz y seré su profesor de Español durante este semestre; formo parte del departamento de Idiomas y del departamento de Estudios Teóricos, me gradué en el Real Colegio de Arte en Londres con especializaciones en fotografía, música, dibujo, pintura y escultura; además, como parte del departamento de Estudios Teóricos organizo varios cursos y seminarios a los que siempre estarán cordialmente invitados, hasta ahora, ¿alguna duda? —pregunta amablemente.

—¿Está soltero? —preguntó una alumna, que si bien recuerda se llama Rebecca Donaldson, otra alumna de intercambio.

—Sobre la clase —dice sin perder su sonrisa amable, a lo que Rebecca se sonroja de vergüenza al escuchar las risas burlonas del resto.

—¿Cómo calificará? —cuestiona Charles en medio de las risas, más interesado en la clase, ignorando el sonido que hizo su corazón al notar que era su profesor.

"Adiós, mi primer amor".

—Bien, las asignaciones serán las siguientes —se voltea escribiendo en el pizarrón y explicando la dinámica de la clase.

Al terminar la clase, cuando la mayoría de sus compañeros han salido se acerca al profesor Sainz.

—Profesor, sobre los cursos y seminarios que mencionó, ¿usted los anunciará o hay algún tablón de anuncios?