🔥CAPITULO 42🔥

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💦<<{Henry}>>💦

Llegamos a la casa con un aura demasiado pesada para mí gusto, pero la decisión que hemos tomado influye más haya de la animosidad que podamos o no tener entre nosotros, concierne a nuestra mujer al cien por ciento, a su seguridad y a la nuestra porque no estaremos bien hasta saber que ella está a Salvo, está feliz y está completa e irrevocablemente enamorada de nosotros.

O al menos así lo siento yo.

Entramos intentando aminorar la densa preocupación que tenemos hoy sobre nuestros hombros, al llegar a la cocina vemos algo que no deberia estar aquí, deberia estar arriba, acostada y sin mover un puto dedo, sin embargo esta aqui batiendo lo que parecen huevos para hacer slgo que seguramente adorare, pero que no probaremos porque lobque tenenos que hacer es mucho mas importante.

Se gira y por primera vez desde que sucedió todo sus ojos se posaron en nosotros brillando como dos faros, una sonrisa hermosa adorna su rostro angelical antes de que repentinamente se borre y mire detrás de nosotros, como si no estuviéramos aquí.

Charlotte: Hola —deja las cosas que estaba haciendo y nos señala las sillas— ¿pueden sentarse? tengo algo que decirles.

Noah: Bebamos algo primero, parece que lo que tienes que decir es importante.

Alexander: Le gustan los refrescos, dale uno mientras tomamos una cerveza.

Noah abre la heladera y a espaldas de la enana prepara todas las bebidas mientras ella retuerce sus manos en su regazo.

Ethan: ¿Es muy importante hablar ahora?

Stefan: ¿Estás bien no?

Charlotte: Gracias —le sonríe a Noah cuando le da el refresco— estoy bien es solo que quería decirl…

Johan: Bebamos un poco primero, porque el ambiente está muy tenso y tengo la boca seca.

Inclina su cerveza para que la enana la choque como si brindarán, ella lo hace mirándolo raro, pero de todas formas bebe de su bebida, todos hacemos una lamentable escena de celos haciendo que brinde con cada uno de nosotros y para cuándo termina sus ojos ya están parpadeando lentamente.

Giovanni: Lo sentimos mucho nena.

La toma en brazos.

Ragnar: Más les vale que ese somnífero sea apto para embarazadas o les ataré las pollas en la parte trasera de un carro y arrancaré.

Joshua: Yo estaré de copiloto.

Lars: Lo es, quédense tranquilos, nada les pasará, ahora vámonos.

Juntamos la ropa que le había quedado aquí la última vez que nos la llevamos, también tomamos toda la ropa de la niña y tomamos las cosas que las amigas de mi mujer dijeron que son importantes para ella, algunos cuadernillos, maletines llenos de lápices, pinceles y tantas cosas para dibujar que no siquiera se el nombre.

Ella nunca volverá aquí, no lo sabe, pero jamás regresará.

Verla perder sangre entre sus muslos, saber que pudo perder a los bebés nos rompió, la poca cordura que aún nos quedaba se esfumó y no podemos decir que nos moleste, estamos locos, irrevocablemente locos por ella.

El asco que una vez sentí de mi mismo por imaginarme tan profundamente metido en el coño de la enana mientras me llama hermano ahora solo es gasolina que prende el intenso fuego que me atrae hacia ella, prende una llama tan potente que mi polla está erecta ahora mismo, como siempre que estoy cerca de ella.

No me avergüenza andar duro las veinticuatro horas del día, no más, porque estoy orgulloso de decir que está diminuta mujer, mi hermana, es la que me para la polla continuamente.

Solo hace falta que piense en sus ojos profundamente apretados y en sus mejillas enrojecidas por el orgasmo para que el presente escape de mi ensuciando mi ropa interior.

No es la primera, no será la última, de hecho ya no me cambio como hacía antes de encontrar a la enana, si me mojo me aseguro de estar cerca de ella, de inocentemente llevarla a mi regazo, me excita pensar que puede olerme o llegar a oler a mi si mojo lo suficiente.

Stefan: No te me acerques tanto hombre, no me gusta ser empalado, me gusta empalar.

Henry: Lo siento, la fantasía se me fue de las manos.

Se pasa una mano por el rostro pareciendo exasperado.

Stefan: Te entiendo hombre, pero para eso existe tu mano, baja esa cosa.

Si fuera tan fácil.

Giovanni: No te gastes, está así todos los días casi todo el día, no hay forma de que baje.

Si hay forma, que ella la baje.

Y eso quizá dure solo unas horas.

Joshua: Estoy igual desde que la conocí, solo imaginar esa diminuta mano envolviendo mi polla es…

Cierra los ojos mientras sus dientes muerden su labio inferior, un gruñido profundo escapa de su garganta dando a entender que se está perdiendo en la imaginación, joder que lo entiendo bien.

Lars: Dios dejen de ser tan… tan… lo que sea y apurense, no va a durar toda la vida el somnífero.

Alexander: Espero que no dure toda la vida porque aunque no creo que se queje si la follo dormida quiero follarla despierta.

Tanto hablar de follarla me está volviendo loco, quiero estar tan profundamente dentro de ella como lo estuve aquella vez en el baño del restaurante, quizá volver a hacerlo en público.

Oh sí joder eso quiero.

Quiero llevarla a un restaurante y recrear la primera vez que nos vimos, quiero verla intentar acallar sus gemidos para que las mujeres al otro lado de la puerta no escuchen, quiero sentir su excitación goteando por todas mis piernas…

Dios quiero todo con ella.

Me tengo que mover o nunca llegaremos a la casa y si eso no pasa no podemos arreglarnos lo que significa que no me dejara abrazarla, mucho menos follarla.

Quizá si, dicen que las hormonas del embarazo te hacen dar muchas ganas de follar.

Espero que eso sea verdad, después de todo tiene muchos hombres para ayudarla en esa parte.

Escapando de mis demonios. [DISPONIBLE EN FÍSICO POR AMAZON]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora