Capítulo #24★ Emoções de ferro🍷 Lana

14 1 0
                                    

"¡Hola estrellitas! Este capítulo es especial porque esta dedicado a una de las personas más importantes de mi vida, el chico responsable de que hoy esté escribiendo un libro, ¡Mi Sempiterno! Felíz cumpleaños mi amor 🌙✨ este capítulo es para ti, particularmente detrás de toda esta historia, lo que publico hoy está relacionado contigo porque poniéndome en los zapatos de Lana, yo también habría puesto tu nombre si creara un vino, así que gracias a ti sé lo que significa amar con el alma... Te amo 🫀

— ¡Un momento! — Me apresuro a sacarme la mascarilla que traigo en la cara porque siguen tocando a mi puerta.
Cuando por fin estoy lista, aunque creo que aún no muy presentable (lo digo por mi cabello alborotado apuntando en todas direcciones) igual me dirijo a la puerta para abrir.

— Hola.

¿En serio destino? ¿No te parece que ya me quedé sin vergüenza?

— Hola, ¿estabas durmiendo? — Felipe entra sin siquiera preguntar.

Cierro la puerta resignada y me volteo para responder...

— No, claro que no.

— Ya. Seguro.

Rayos, no me cree.
Y no digo que no me emociona verlo pero es preciso por esa razón que habría preferido tener mejores fachas, a este ritmo dejaré de gustarle.

— Venga, ¿sucede algo? — El pobre debe pensarlo porque me quedé en silencio pero la cosa es que hablaba conmigo misma.

— No pero oye, ¿Es esa la manera de saludarme? — Consigo lo que quería porque se le iluminó el rostro y esbozó una sonrisa sincera.

— Ven aquí. — Tomó una de mis manos y me hizo caminar hacia él para acortar el espacio que nos separaba. Me dió un abrazo que no sabía que necesitaba hasta que estuve entre sus brazos y al separarnos, depositó un beso corto pero tierno en mis labios.

— ¿Sabes que es lo mejor que puede pasarme al comenzar un día que pintaba ser aburrido? — Me emocioné sin siquiera saber la razón.

— ¿Qué? — Lo solté casi tan rápido como para que se notase mi emoción.

— Llegar aquí y ver esa sonrisa que me vuelve loco porque solo es para mí, poder admirarte en momentos tan naturales como estos, dónde solo traes una pijama y que sé que te mueres porque habrías deseado arreglarte pero la verdad es que no te avisé que venía porque justo así quería verte. Los estereotipos déjaselos a los demás.
Yo quiero esto — Me señaló y sentí que estaba temblando de pies a cabeza. — A ti en tu versión más transparente. Es esta la imágen que quiero tener cada que te recuerde.

Dijo todo eso como si fuese lo más normal del mundo, mirándome directamente sin culpas y con una sonrisa gigante.
Siento que esto es demasiado, no llegué nunca a pensar o siquiera imaginarme que algo así podría suceder. Sentir por dentro lo que Felipe causa en mí antes ni siquiera era lejano sino imposible y ahora estoy aquí, debatiendo en si echarme a llorar o besarlo directamente.

Al final me fuí por la segunda y lo besé, rodeé su cuello y hundí mis labios en su boca con ansias porque solo un beso desesperado puede demostrarle lo que me hizo sentir, lo que sus palabras causaron en mi y al mismo tiempo lo felíz que me hace.

— Debería ser cursi más seguido si me besarás así cada que lo haga — Murmuró cuando nos separamos, lo que hizo que mis mejillas se tintaran de rojo automáticamente sin poder evitarlo.

Bajé la mirada para evitar que me viera pero creo que fue tarde.

— Te ves hermosa, no te ocultes. — Levanté la mirada y ambos sonreímos como dos bobos.

Mi Marca de VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora