Capítulo 24

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-Malú-

La última tartaleta de salmón sobresale de la bandeja, la mayoría se la ha comido mi hermano, y yo tengo poco apetito.

Daniela ha insistido a que pruebe un bocado, y como mucho me he comido un plato de carne que sobró del almuerzo.

Desde que leí la carta de mi ex novio Ángel, no me había dado cuenta antes de haber luchado por nuestra relación, ir a Londres a buscarlo y traerlo de vuelta a España, sería una buena opción, pero ahora es demasiado tarde. Él ya me ha dicho que me olvide de él, pero no lo puedo hacer, no sólo por ser un amor del pasado, si no por ser el padre de mis hijas. Volví a escribirle una vez que leí la carta, Alejandro me hubiera dicho que tendría que hacerlo y lo hice, mandé una respuesta sobre sus palabras de despedida del año 98, pero cómo ignoró el mensaje volví a mandar otro, otro mensaje más formal que el anterior explicando que se trata sobre el bebé que tuvimos hace dieciséis años.

"Sé que he sido una cobarde, lo reconozco. No quise leer la carta en su día por egoísmo de haberme dejado por palabras escritas, y no por tu propia voz. Me hubiera gustado verte una última vez.

Será extraño para tí recibir este mensaje después de dieciséis años, pero no te vengo a reprochar nada, sólo te debo una respuesta. Si lo hubiera leído antes, nada de esto hubiera pasado...siento muchísimo cómo hemos acabado.

Me hubiese gustado recibir algún mensaje, o una llamada estos años, pero entenderé que tengas mujer e hijos, no quiero arruinarte la vida.

Tán sólo quiero que me respondas, una última vez, y paso página por completo.

Yo también te quise, y te seguiré queriendo en mi recuerdo"

"Ángel, por favor, responde. ¡Te lo digo enserio! Entenderé que estés enfadado, pero no respondes a mis llamadas, por eso mismo te escribo. Tengo algo muy importante de lo que hablar contigo, se trata de nuestra bebé, por favor. ¡Por Lucía!"

-Sigue insistiendo -dice Alejandro-

Alejandro fue la persona que llamé, él me dijo la noche anterior que lo avisara si hay novedades. Así hice, él enseguida llegó a mi casa, y creo que sus consejos me van a llevar por el mal camino, lo veo venir, y mis intuiciones nunca fallan.

-No voy a seguir insistiendo, ya le escribí, ya está en sus manos si quiere o no saber de su hija. Al final me va a bloquear

Así ocurrió. Él me bloqueó, tanto de WhatsApp cómo las llamadas. Definitivamente no quiere saber nada de mí, ¿Acaso en algún momento le he hecho tanto daño para recibir un trato así? No responder a una carta no es motivo para ponerse así, o sí, si se trata de un viejo amor al que amaste, y no recibiste respuesta.

Durante estos meses he vivido en completa agonía, cualquier llamada que recibo pienso que es él, al igual que los mensajes. Algunas noches sueño con él, a veces son pesadillas y otras la última vez que lo ví antes de salir a actuar en el 98.

-Malú en diez minutos salimos, ¿Estás lista? -habla Salva-

Asiento con la cabeza, miro por última vez una foto de él, una de las fotos que me pasó Daniela, por lo visto se lo encontró por casualidad en Instagram, pero de casualidad no hay nada, mi hija es igual de curiosa cómo su madre, y seguramente investigó, dio con él y se pone a stalkear la cuenta de su padre.

-Por favor Dani -es la tercera vez que le reprocho de que me pase su móvil, necesito saber más de él-

-No Mamá, te vas a hacer daño -me dice ella- ya es suficiente las fotos que te he mandado

Volver a nacer [Malú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora