¿Y después?

XV

Austria, si bien, Sergio solo iba para Spielberg, se sentía emocionado, después de la celebración había sido invitado por la familia Mateschitz a pasar mitad de las vacaciones con ellos, después irían a México, con la familia de Checo.

No habían hecho tanto tiempo de viaje, se habían ido en el jet privado de los Mateschitz, Sergio aprovecho un poco para dormir, quería descansar lo más que su cuerpo le permitiera, quería conocer todo de Austria y de su probable familia política.

Mark sonrió al verlo dormido, le tomó unas cuantas fotos, quería atesorar todos estos momentos, después de un rato, Sergio abrió los ojos y lo primero que vio fue a Mark leyendo, sonrió y con voz rasposa dijo.

Te ves tan guapo -. Mark se acomodó al verlo.

Tu siempre te ves guapo, hasta recién despierto -. Sergio le hizo un espacio a su lado y Mark se sentó junto a él.

Mark -. Se acurrucó en su pecho siendo abrazado por el mencionado.

Mhm? -. Dijo viéndolo.

Estoy enamorado de ti -. Mark acaricio su mejilla.

Y yo de ti Checo, eres el amor de mi vida -. Sergio lo vio a los ojos, Mark lo tomó de las manos y lo beso, siendo correspondido por Checo.

Los días pasaron, recorrieron Viena, Salzburgo, Graz, Linz, Melk, muchos lugares, muchas tradiciones que enamoraron a Checo, se sentía tan bien con Mark, no tenía miedo, quería conocer todo del país natal de Mark.

Checo y Mark cada vez se unían más, querían estar juntos, no querían ir rápido, querían tardar el tiempo que fuera necesario.

Ese era el último día de Checo en Austria, ansiaba volver a casa con sus papás, los extrañaba, le encantó conocer Austria, pero, extrañaba a su México.

Checo -. Mark toco la puerta de la habitación que, aunque estaba abierta, pensaba en la privacidad de Checo.

Dime Markie -. Se acerco sonriendo.

¿Qué debo llevar a México? -. Dijo viéndolo nervioso.

Lo que siempre usas, no hay nada en específico, solo lleva un traje de baño -. Sonríe.

La casa de mis papás está en Puerto Vallarta -. Se recargo en la pared.

Puertou valarta -. Intento decir Mark.

Vallarta -. Repitió Sergio sonriendo.

Vallarta -. Dijo Mark. - Puertou Vallarta -. Sonrió y Sergio lo abrazo.

Vas excelente -. Sonrió Sergio.

Aún no puedo creer que vaya a estar en casa de tus papás, los he visto en el paddock pero, no así, no estando tan enamorado de su hijo -. Tomo la cintura de Sergio tiernamente.

Me pasó lo mismo con Dietrich, él sabe que estoy enamorado de ti, enamorarse del hijo del jefe, es algo, cliché, así que me daba pena verlo a los ojos -. Rodeo su cuello con sus brazos y lo beso.

Estoy nervioso, qué tal si tus papás no me aceptan -. Suspiro nervioso.

Que dices, mis papás te van a amar -. Lo ve sonriendo.

Entonces, traje de baño, ropa casual -. Sacó su lista y anotó lo que Sergio le dijo.

Mark, relájate, ya estuviste en México -. Tomó los hombros de Mark.

Si, pero no con la familia de mi novio -. Sonrió Mark.

¿Novio? -. Se sonrojo Checo.

Sergio, no descansaré hasta que seas mi novio, quiero hacer las cosas bien, quiero conquistarte, solo quiero tenerte a mi lado -. Acaricio su mejilla.

Se unieron en un beso, un beso puro.

Los días en México habían empezado, la familia de Checo había amado y aceptado a Mark, don Antonio no era tonto, sabía de los sentimientos de ambos, sin embargo, prefirió guardar silencio, al final de cuentas solo ellos dos sabían su historia.

No había mucho que Mark pudiera conocer, Checo se encargó de mostrarle muchas cosas, así que solo volvieron a visitar muchos lugares, Mark había agarrado un bronceado increíble ante los ojos de Checo, lo que lo hacía perfecto.

El regreso de la temporada 2023 se estaba acercando, Sergio y Mark habían estado entrenando, Sergio un poco más fuerte, Mark para mantener su figura. Una noche antes de partir a Bahréin, para los test pretemporada, estaban bajo el cielo estrellado, tomados de la mano.

Sergio, me ha encantado estar contigo -. Acaricio su mejilla.

Mark, sé que debo parecer disco rayado, pero, en serio soy tan afortunado de tenerte -. Lo volteo a ver y Mark se enderezó un poco.

Aquí en la playa -. Se sentó y sentó a Sergio con cuidado. - Te prometo que te voy a hacer feliz, te voy a amar y te voy a respetar -. Entrelazo sus manos.

También te prometo hacerte feliz, amarte y respetarte -. Vio el reflejo de la luna en sus ojos. - Y -. Fue interrumpido por alguien.

A POCO SE ESTAN CASANDO CABRONES -. Grito Toño, quien había estado observando de lejos, pero no tan lejos como para escucharlos.

ORALE PINCHE TOÑO METICHE, A CHINGAR A SU MADRE -. Grito Sergio irritado.

HUEVOS -. Le hizo la señal a lo lejos y se metió a la casa.

Mark río divertido y Sergio también lo hizo, sin pensarlo, se volvieron a perder en sus miradas, en decirse cosas bonitas, en su mundo, en disfrutar su ultimo día antes de volver al mundo real.