EXISTE EL AMOR - AL FIN TE ENCONTRÉ

CAPÍTULO CINCO

- ¿Te gusta amor? - Heidi habla en un susurro a mi oído

- Ah Ah, si, me encanta amor, se siente tan bien. - trato de hablar

- ¿Quieres que pare? - siento el aliento de Heidi cerca del lóbulo de mi oreja

- No, tú sigue yo te aviso cuando sea el momento

- está bien cariño que no pienso parar

- ¡¡¡OHHH !!! eres maravillosa amor, te amo

- estos dedos nunca fallan, en su misión - se siente también las manos de Heidi estando en mi...

- engreída, pero vale la pena esto, por eso Te amo - ladeó mi cuello y solo formó una gran "O" con mi boca disfrutarán de este momento.

- también Te amo, pero ya se cansó mi mano

- no aguantas tanto, que decepción

- Creo que ya te relajaste lo suficiente con el masaje, ¿Te sientes mejor?

- si, gracias amor.

Heidi se encontraba haciendo me el masaje que me había prometido, ah realmente lo necesitaba ya no aguantaba lo tenso que tenía mis tendones y músculos, la verdad no he descansado mucho de tantos contratos que tengo que cumplir.

Creo que pasando los próximos contratos me tomaré unas vacaciones, ya las tengo más que merecidas.

- ¿Cuál gracias? Ahora sí me voy a cobrar como me gusta - Heidi empieza a darme besos sobre todo mi rostro hasta llegar a mi cuello mis manos estaban viajando sobre la espalda de Heidi, pero... La ama de llaves de Heidi toca la puerta de nuestra habitación.

- señorita Heidi, disculpe que interrumpa su descanso, pero la señora Chankimha está aquí - solo abro los ojos como platos el saber que mi madre está aquí

- gracias señora Mary, en seguida vamos

- ¿Qué hace aquí mi madre? - es lo único que le pregunto, no es que no me agrade su presencia pero la iba a ver mañana, hoy tengo la cena con Jane.

- lo averiguamos ahorita cariño - Heidi se quita de encima de mi, se arregla un poco y sale de la habitación, yo me quedo sobre la cama dejando salir un suspiro de frustración.

Bien Freen levántate antes que se atreva mi madre de venir hasta aquí, ya que Heidi le dio el permiso para poder andar en su mansión como si fuera de ella.

Procedo arreglar mi cabello y me coloco una playera para estar más cómoda, salgo de la habitación, voy bajando las escaleras y veo a mi madre y a Heidi hablando muy animadamente, mi madre considera a Heidi como a una hija más a veces siento que la quiere más a ella que a mí.

- yo dijo que no dejes ir esta oportunidad, piénsalo hija - escucho a mi madre hablar con Heidi

- señora Umeko - solo veo como niega con la cabeza mi madre - mamá - si mi madre en cuanto se enteró que Heidi es mi novia, prácticamente el día que le dimos la noticia, le dio la autorización que se dirija a ella como mamá - el tiempo lo dirá además ahorita estamos bien así

- solo dijo que no se tarden tanto - Frunzo el ceño, quiero saber de qué están hablando

- ¿Qué no nos tardemos en que? - entro a la sala, que solo veo una gran sonrisa de mi madre.

- ah cariño, ya sabes lo que siempre nos dice mamá - solo niego con la cabeza, bueno pues mi madre prácticamente ya quiere que nos casemos y ya quiere ver correr a sus futuros nietos, es el tema de conversación que siempre saca a resaltar cada que estamos aquí en Tailandia.