II (+18)

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Desperté con un leve dolor de cabeza y escuché ruidos en el baño. "Seguro es Vicky que regresó y se está duchando" pensé. Me di vuelta y puse mi cara contra la almohada, deseando unas horas más de sueño. Sentí un tacto cálido en mi espalda y de inmediato supe que no era mi mejor amiga, la mano que me tocó era más grande que la de ella. De un golpe salte de la cama y volteé

- Así me das los buenos días, maleducada? -Era Santiago sentado en el borde de la cama cubierto con una toalla a la cintura y sosteniendo una taza de café

- Santiago, hola emm que hora es?

-Son las nueve de la mañana, tu celular no dejaba de sonar y me desperté. Alcancé a ver qué una tal Vicky te dejo como 5 llamadas perdidas y un mensaje diciendo "Amiga en un rato llego al hotel. Tengo que contarte algo"

- Ya veo, sos de los que se ponen de mal humor si no duermen -me incliné sobre él para alcanzar mi teléfono y lo atrapé viendo mi trasero mientras tomaba su café, antes de poder sentarme otra vez en la cama

- Mmmh puede ser - me ofreció su taza y le di un sorbo-

Mande muchos mensajes a Vicky hasta que me contestó y dijo que llegaba en 15 min

-Ya viene mi amiga, San. Quizá quieras... vestirte -mire un bulto que asomaba en su toalla y luego lo miré a los ojos-

- No, porque aún no recibí mis buenos días -miro hacia un lado a la ventana, logrando que el sol se pose en su cara-

Reí y tomé la taza de sus manos y la coloqué en la mesa de luz, me acerque a él, tomé su cara entre mis manos y lo besé

-Buenos días, señor Santiago. Cómo lo trata está bella mañana?

-Mmh, no tan bien como vos anoche

Me asusté. ¿Acaso hicimos algo luego de acostarnos y no recuerdo nada?

- Tranquila, te dormiste al toque anoche. No te puse un dedo encima, no soy así

Mi mirada se relajo y cuando me di cuenta mis manos estaban acariciando sus hombros, logrando darle un pequeño escalofrío. Sonreí y lo besé una vez más

- Tengo que preguntar.. A vos te hubiera gustado que suceda algo más?

-La verdad... -hice una pausa para pensarlo bien- SI ..

Santiago me tomó en sus brazos y me besó apasionadamente, distinto a anoche, con más deseo, más desesperación. Lamió, mordió y succionó mis labios y lengua y yo respondí  de igual manera. 
Me recostó en la cama y se arrodilló entre mis piernas para sacarme el pijama y atacó sin piedad mi cuello y cada uno de mis erectos pezones. Mis senos son de un tamaño promedio a grande así que cada uno entraba a la perfección en sus manos.
Sentí un calor insoportable dentro de mi cuerpo y lo tomé por la cintura con mis piernas, de un instante a otro estaba en llamas. Este hombre despertó en mí algo que jamás conocí. Mi hendidura recibió a gusto su relieve que aún con la toalla puesta podía sentir cada centímetro, cada palpitante vaso sanguíneo.
Nos movimos al ritmo de nuestra pasión y me descontrolé, tome una de sus manos y la puse en mi cuello, lo cual le sacó una sonrisa enorme y asentí al aumento de velocidad
Mi cerebro se nubló, no salía ni una sola sílaba y mi cuerpo me dió celestiales espasmos que terminaron en dos grandes descargas sobre la tela que cubria el increíble cuerpo de Santiago.
Saqué su mano de mi cuello y recuperé el aliento de golpe. Me había devuelto la vida.
Mis oidos se taparon por completo. Santi se sacó la toalla de un tirón y la arrojo lejos, colocó su gran maravilla sobre mi abdomen y la coloco en mi clítoris. Ambos lanzamos un suspiro de alivio

-Mas rápido- pedí entre respiraciónes ahogadas-

-Nunca un por favor, eh - tomo mi cara con fuerza y me besó mientras aumentaba su ritmo y me hacía perder la razón

-Santiago!! - llegue a mi segundo climax en cuestión de segundos y se desplomó encima mío, aún moviéndose, esta vez más pesado y errático

Nuestros gemidos y sonidos de éxtasis inundaron la habitación cuando de repente golpean la puerta fuerte

-Amigaaaaa??? Amiga levantate, ya llegué!!! - grito Vicky desde el otro lado de la puerta

-Mierda, ah Santiago es Vicky- clave mis uñas en su espalda con la llegada del tercer orgasmo.

-Mmh ...Que espere - intensificó sus embestidas logrando un pequeño calambre en mi zona más sensible y me apretó en sus brazos cuando llegamos a aquello tan esperado, juntos-.

Se levantó, tomó su miembro con una mano y me regaló una lluvia blanquecina en todo el abdomen y parte de la cara, que recibí con la lengua fuera cuál nieve de invierno

- Ahora sí, que pase tu amiga- me dió un dulce beso en la frente , agarró su ropa y fué al baño.

Cómo pude, me limpié con las sabanas y vesti rápidamente. Para nada segura de qué iba a decirle a Vicky ...

Abrí la puerta con serenidad disfrazada y dejándola pasar

-Hermana!! Recién me despierto. Disculpa...  Emm ¿Dónde fuiste que no viniste anoche?

Vicky me miró sospechosa, se sentó en la cama y doblo algo de su ropa que estaba en la cama

-Buenos te cuento, en el boliche anoche conocí un chicooo.. y bueno le dije que está tarde nos vamos de regreso a casa y me fui con él! Jajaja es dueño de una de las tiendas de ropa que hay en la otra cuadra y bueno, me regaló ropa jajaja tomá probate esta fald....-Se quedó inmóvil al ver a Santiago salir del baño completamente aseado y llevándome a la puerta-

-Vos debés ser Victoria. Mucho gusto, buenos días. Hermosa? -me llevo de la mano a la puerta para despedirse-

-Santi, ya te vas. Te deseo lo mejor - besé su mejilla y dejé que me abrazara-

- Igualmente. Fue muy ... lindo - besó mi frente, se despidió de Vicky y salió de la habitación y del hotel -


-Amiga que fué esoooo, me podés explicar?!?? Había un hombre en el cuarto y no me dijiste??? - se desespero Vicky-

- Ay, si... Es que emm pasaron cosas jajaja como con el de la tienda de ropa vamos! tenemos que empacar y salir a comprar los regalitos y los souvenirs, dale levántate se hace tarde, vamos! - fui al baño y me duche de nuevo, está vez perdida en el recuerdo que acababa de guardar en mí -

Con las valijas ya listas, bajamos a desayunar con el resto de mis amigos y salimos a comprar recuerditos para nuestras familias. Almorzamos súper rápido y corrimos al aeropuerto, llegamos a tiempo para el vuelo. Y abordé con cierta nostalgia la aeronave. Vicky se dió cuenta, porque me saco toda la verdad de adentro. Simplemente no se qué o cómo hizo pero le conté todo. Tenía la esperanza de ver a Santiago en algún asiento del avión pero recordé que me contó que él y su familia no regresaban a Argentina hasta dentro de una semana.

Quizá nunca más iba a verlo, pero por dentro lo deseaba a mi lado con todas mis fuerzas, sin explicación alguna. Por suerte mi amiga me sacó de mi niebla mental con sus chistes y ocurrencias. Vimos una película y dormimos a gusto durante el vuelo. Luego hicimos escala en Buenos Aires antes de abordar el siguiente avión al interior. De lo que pude ver de la ciudad, me gustó. Tal vez en el futuro trabaje allí, tal como sugirió ÉL ...




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Hasta aquí el segundo capítulo!😍😍🥰✨🐸

El gordo se trae un malhumor a veces🙄🙄 jajajajajaj

Porfi díganme que tal les pareció. Comenten qué pronto actualizo!

Besitos💋💋💋

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