36. Quédate en el jardín del palacio frío (Parte 2)

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El palacio frío estaba brillantemente iluminado, con innumerables antorchas y linternas iluminando el interior y el exterior del patio, nunca antes había visto una escena así. Gritó dos veces de terror y luego huyó hacia el Jardín Pinmei con el rabo entre las piernas.

Los guardias colocaron la cama en el patio y los sirvientes también colocaron los muebles traídos en el patio. Durante un tiempo, el patio estuvo lleno de gente y muebles por todas partes. La última vez que el Jardín del palacio frío estuvo tan animado fue cuando robaron el cerdo estofado, y esta vez el ruido fue incluso mayor que la última vez.

Yan Shinning se sentó en la cama con la ayuda de Bai Tao. Bebió la sopa de pescado blanco lechoso y miró su casa con tristeza. Para permitir que la silla de ruedas de Ji Song entrara y saliera sin problemas, los guardias tuvieron que quitar los umbrales de todas las habitaciones.

Afortunadamente, el umbral de la puerta es fácil de instalar y quitar. Incluso si se desmonta ahora, se puede instalar fácilmente más adelante. Incluso cuando vio a los guardias sacando los muebles de la habitación, no pudo contenerse: "¡Sean amables, con cuidado!".

Aunque estos muebles son viejos, fueron reconstruidos por él y Bai Tao a partir de un montón de basura. Aunque no se podía comparar con los lujosos muebles del palacio, era una de las pocas cosas que se le pertenecieron después de su llegada a este mundo. Si los guardias fueran demasiado duros, él seguiría siendo quien haría las reparaciones después de que Ji Song se fuera.

Al ver lo nervioso que estaba Yan Shinning, Ji Song se interesó. Quería ver qué había en el palacio frío que pudiera hacer soñar a Yan Shinning con eso, así que levantó la mano: "Yan Ke, entra conmigo y echa un vistazo".

Yan Ke respondió: "Sí".

Aunque había estado antes en el jardín del palacio frío, esta era la primera vez que Ji Song entraba a la casa. Su intención original era simplemente entrar y echar un vistazo al lugar donde solía vivir Yan Shinning, y luego encontrar un lugar para colocar su escritorio y sus documentos oficiales. Pero después de andar por ahí por un tiempo, tenía sentimientos encontrados.

Si no lo hubiera visto con sus propios ojos, nunca habría imaginado que el lugar donde vivía Yan Shinning estuviera tan ruinoso.

La casa era grande, vacía y limpia, pero no había muchos muebles en ella. A primera vista, los muebles parecían estar bien, pero al examinarlos más de cerca, algo andaba mal. Algunas sillas tienen patas rotas y están cubiertas con ladrillos azules y astillas de madera. Algunos gabinetes tienen agujeros y están cubiertos con astillas de madera delgadas...

Mirando a su alrededor, los muebles de toda la habitación no están en buenas condiciones. Cuando vio por primera vez estos muebles anodinos, Yan Ke todavía podía reír a carcajadas y las comisuras de los labios de Ji Song también estaban ligeramente levantadas. Cuando vieron dónde dormía Yan Shinning, no pudieron reír más.

La "cama" de Yan Shinning está hecha de ladrillos azules y tablas de madera. No solo no es hermosa ni cómoda, sino que puede rodar hasta el suelo si se da vuelta demasiado.

Yan Ke solo pasa el rato en la cocina los días de semana al ver que hay muchos utensilios en la cocina, siempre pensó que la casa en la que viven la princesa y los demás no es muy diferente. Pero cuando lo vio con sus propios ojos, sólo sintió una tristeza indescriptible.

La digna princesa del palacio vive en un lugar que ni siquiera es tan bueno como el lugar de los sirvientes.

El rostro de Ji Song estaba solemne y le susurró a Yan Ke: "Llama a Leng Jun".

Quería preguntarle a Leng Jun, ¿qué diablos estaba haciendo él, el mayordomo? ¿Por qué dejar que la princesa use muebles tan gastados? ¡Ni siquiera tiene una cama completa!

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