Sinopsis

47.4K 3.3K 336
                                    

La sexualidad en tiempos lejanos, era un tabú en la sociedad.

" El tema del que nadie quería hablar."

Ni siquiera a los jóvenes, que crecían inexpertos en el mundo.

Simplemente confiaban en el hecho de que las escuelas cumplieran con aquello, como si realmente fuera suficiente y no poco responsable de parte de los padres y representantes de cada joven, adolescente o niño.

Namjoon fue parte de esa generación.

Tuvo una adolescencia un poco rebelde, con padres liberales que lo dejaban gozar la vida a su manera.

Sin pensar en la reales consecuencias que traía, no tener una figura de autoridad en su vida.

Lo aprendió a sus muy tempranos dieciséis años, cuando una chica llegó a su puerta con un bebé en brazos, afirmando que ese era su hijo, y que ya no podía hacerse cargo de el.

Una noticia bastante fuerte para un simple adolescente en crecimiento, que no tenía conocimiento de absolutamente nada en el mundo.

No sabía que era ser responsable.

O tener un trabajo, ni siquiera velaba por el mismo.

No podía tener a ese bebé.

Pero para su "Suerte" sus padres decidieron apoyarlo, quitándole la poca educación que tenía y enviándolo a trabajar a temprana edad para sustentar los gastos del pequeño.

Que no fue su elección, pero que sin tener voz ni voto se había vuelto su responsabilidad.

Años más tarde el tiempo pasó, el pequeño JungKook como el mismo lo había nombrado, creció a medida que el también lo hacía.

Con el tiempo dejo de ver al pequeño como una molestia y la razón por la que su vida se hubiera arruinado, empezó a quererlo, a apreciar cada detalle de su pequeña criatura.

Empezó a amarlo.

Con muchos años más, finalmente sus esfuerzos junto a su padre habían valido la pena, tenían un taller de autos y se sustentaban, Jungkookie seguía creciendo y siendo cuidado por sus abuelos y su papá.

Pero una tarde y por casualidad de la vida, el pequeño taller fue descubierto por el dueño de automotrices Park, uno de los mas grandes empresarios del país.

Aún que el taller lo había descubierto por su único y descuidado hijo que había chocado su lujoso y caro auto, aún así Namjoon hizo un gran trabajo y lo dejó reluciente, ganándose los elogios de aquel hombre.

Y a pesar de que Park Jimin era mucho mas joven que el, su tierna, alegre y muy contagiosa personalidad empezó a hacerlos amigos.

Eran tan amigos, que Jimin en  agradecimiento no dudo en conseguirle un trabajo en la empresa de su padre, lo que comenzó como un simple secretario, terminó en el puesto administrativo como jefe de ventas.

Con el tiempo conocieron la vida del otro y eso incluía al pequeño y muy tierno JungKook.

Incluso compraron una casa juntos y se mudaron los tres a ella, Namjoon, Jimin y el pequeño Jungkookie.

Y el tiempo siguió haciendo de las suyas.

JungKook finalmente cumplió diecisiete y Jimin tenía veintitrés. Cuando Jimin conoció a Jungkook tenía quince años y el pequeño tenía nueve, ser joven le ayudo a tener una buena relación con el, entre juegos, salidas, postres y excelente convivencia, había logrado ganar el cariño de su pequeño Jungkookie.

Aún que en todos esos años también se había estado preparando para tener responsabilidades y su título.

Finalmente Jimin se había graduado de abogado a sus veintitrés años, y ahora estaba a punto de ingresar a uno de los bufets de abogados más reconocidos de Japón.

Era la oportunidad que tanto había estado esperando, después de todo amaba su carrera y estaba dispuesto a todo por ella.

Aún que no sabía los sentimientos que el pequeño Jungkookie sentía por su mayor, incluso si era el mejor amigo de su padre, su corazón latía muy fuerte cada vez que lo veía.

Su corazón se rompió cuando Jimin se fue.

Pero el no sería un niño para siempre, y Jimin tendría que volver algún día.

Para ese entonces...

Se aseguraría de no dejarlo ir nunca más.

Seria suyo.







Mine +18[KM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora