EXTRA: Feliz cumpleaños

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Después de tanto tiempo, después de haberme aventurado a vivir mi amor con Jungkookie al máximo, finalmente hoy era su cumpleaños numero veinte. 

En corea por fin cumpliría su mayoría de edad, en estados unidos lo era desde hace mucho e incluso lo disfrutaba el muy desconsiderado.

Sin embargo la presión en mi pecho aumentaba, Jungkookie cumplía veinte años y yo ya tenia veintiséis, a medida que el tiempo transcurría el pensar que llegara a un punto donde tendré treinta años y el aun estara en sus veintes, o quizás si lo pienso mas a fondo, aun y cuando sea un viejo el no lo será.

La verdad es que sigo siendo muy mayor para el.

Y ese día la inseguridad de aquello me golpeo muy fuerte.

Mientras compraba ese pastel cubierto de caramelo y uvas, elegí acompañarlo con velas del numero veinte, sabia que sus nuevos amigos irían a nuestro hogar, pues en su cumpleaños numero diecinueve lo habían hecho, no estaba mal, después de todo jamás podría negarle a Jungkook vivir cada etapa de su vida.

De camino a nuestro hogar pensé en la pequeña y bonita decoración que le haría, Nam nos había llamado muy temprano antes de que Jungkookie se fuera a la universidad, ver a Jungkook sonreír mientras hablaba con el, mientras le hacia caras y vocecillas a  su pequeño hermano, me hacia estremecer.

Como si una corriente eléctrica invadiera todo mi sistema nervioso.

 Llegue a casa justo a tiempo, debía preparar algunos bocadillos, algunas decoraciones y todo quedaría perfecto para que el celebrara su cumpleaños.

Entonces el fuerte dolor de estomago me azoto y sabia perfectamente a que se debía, las inyecciones anticonceptivas últimamente me provocaban ese tipo de dolores, justo ayer había reforzado la dosis mensual y los dolores aparecían cada cierto tiempo.

Debía ir al medico, después del cumpleaños de Jungkookie.

Me llevo un par de horas y finalmente había decorado nuestro hogar para el, los globos de color morados y azules colgaban del techo, algunos en las paredes y finalmente otros en el suelo, parecía un poco infantil, si definitivamente lo era.

Incluso la mesa llena de bocadillos y dulces, parecía un puto cumpleaños de niños.

Mire a mi alrededor, el dolor volvió a punzar y tome mi estomago en mis manos, respirando profundo para tomar aire.

Cuando paso, me incorpore y camine hacia el baño, el estaba a nada de llegar y necesitaba darme un baño.

La hora se aproximaba, sentía nervios, sobre todo por el regalo que te tenía preparado.

Me miro en el espejo una vez más, no acostumbro a vestir ropa tan holgada, pero me ayuda que el encaje no se marque.

Entonces cuando oigo el pcódigo de seguridad, me aproximó a usar un poco de perfume y salir de la habitación.

Las voces en nuestro hogar se hacen presentes y siento aún más nervios, las náuseas me invaden y la leve punzada en mi estómago me hace parar.

- ¡¿Amor?! - Lo escuchó aproximarse y me repongo mirando al frente.- Ahí estás.

Su sonrisa adorna su lindo rostro, está radiante, está tan joven y atractivo como siempre.

Me envuelve en sus brazos, huele mi cuello y lo besa muchas veces.

- Gracias dulzura, todo está perfecto y precioso.

La preocupación de que el ambiente fuera demasiado infantil para el desaparece, respiro tranquilo y envuelvo mis brazos en su cuello.

Mine +18[KM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora