Wall Seven +18 ||Jeon Jungkook||

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Seúl había amanecido con un clima bastante fresco. En la empresa todo estaba yendo a la perfección y para ser un lunes había menos trabajo que antes.

Salía de la oficina de Jin con unos papeles en mano mientras le daba un último sobro a mi café. Al tirar mi vaso en una papelera cercana, me encaminé hacia el ascensor. Observé de reojo cómo el salía de su oficina, remangando las mangas de su camisa blanca.

Me sentí excesivamente nerviosa en ese momento, tomando los papeles con fuerza pasé por su lado sin decir absolutamente nada.

—Buenos días, ¿no?—cuestionó, a lo que yo seguí ignorándolo.

Realmente no quería escuchar nada de él por los momentos, mi cabeza no estaba en su sitio y tenía muchas cosas en ella.

Toqué el botón del ascensor y esperé en silencio, concentrándome en los papeles que tenía en mano. Escuché sus pasos alejarse a otra dirección. Las puertas del ascensor se abrieron dejando ver a Taehyung a quien saludé rápidamente con una sonrisa.

—¡Marianne, querida!—exclamó dándome la mano—, ¿Como estás?

—Hola, Taehyung. Estoy bien, ¿y tú?

—Todo bien, solo tratando de sobrevivir a otro día en esta jungla corporativa. ¿Qué tal fue la reunión con Jin?—cuestionó saliendo del ascensor y apoyándose en una de las paredes cercanas a este.

—La reunión fue bastante bien, gracias. Jin tiene algunas ideas interesantes para el próximo proyecto.

—Siempre está inventando algo emocionante. Ojalá me tocara trabajar en algo que no involucre números y informes interminables—bromeó.

Ambos reímos rápidamente y él miró detrás de mi, dejando de reír inmediatamente.

—Marianne debo retirarme para una reunión importantísima—aclaró su garganta y acomodó un poco su corbata— Mándale saludos a Alisson y dile que está hermosa el día de hoy.

Asentí rápidamente aguantando un poco mi risa al ver la actitud tan extraña de Taehyung. Me fui rápidamente al ascensor tocando el botón y dirigiéndome dentro de la cabina.

Las puertas del ascensor se cerraron, dejándome sola con la confusión que flotaba en el aire. No entendía del todo la situación, pero decidí dejar de darle vueltas y concentrarme en el resto del día.

Narra Jeon Jungkook.

Me extrañé al no recibir respuesta alguna de su parte, ¿ni un besito, o algún insulto ni nada? Llegué a la puerta de Yoongi y la toqué dos veces, miré a mi derecha consiguiéndomela leyendo esos papeles que tenía en mano. Vi como le sonrió a Taehyung y como hablaban tan animadamente.

¿Que carajos hace?

Elevé una de mis cejas incrédulo.

Conecté miradas con Taehyung quien precisamente se había dado la vuelta mirándome y como impulso abrí la puerta encontrándome a Yoongi y Namjoon leyendo unos documentos.

—¿Interrumpo algo?—pregunté, tratando de mantener la calma, aunque por dentro algo no estaba del todo bien.

Me estaba muriendo de celos.

—No, para nada. ¿Qué necesitas, Jungkook?—respondió Yoongi sin levantar la vista de los documentos.

Namjoon también me miró con curiosidad, esperando mi respuesta.

—Nada importante, solo vine a traer unos informes—murmuré dejándole el pendrive a Namjoon en su mano.

—¿No les parece extraño que Marianne no me haya saludado?—cuestioné tomando un cigarro que estaba en mi bolsillo.