It would be worthwhile.

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Narra Jan.


Habían pasado aproximadamente 5 horas desde que estoy esperando la llegada de mi Nicole, al igual que han pasado cinco horas desde que tuve aquella platica con el doctor. Quizá esas noticias me mantuvieron relajado, pero no del todo. Aún tenia diferentes cosas en que pensar como en el ser buen padre, atender necesidades de nuestro hijo y sobre todo sus estudios.   Aún seguía con el dolor de cabeza, pero eso era lo de menos al saber que Nicole y nuestro hijo estarían nuevamente conmigo, ¿No?.

Me quede en la sala de espera viendo de un lado al otro de aquellos fríos pasillos que se contemplaban en el hospital, con tal de tener a mi vista aquella silueta tan conocida. Pero sin rastro de ella. Tal vez me encontraba un poco desesperado en este momento, pero vamos, ¿Me entienden, cierto?.  Me pare de aquellos incómodos asientos para dirigirme a la cafetería, total tendría que hacer algo mientras espero. Y esta probablemente es la mejor decisión después de no comer durante casi un día. Me lo lamentaría... lo sé. Más si mi alimentación no es como antes durante estos días. Creo que baje como unos 10 kilos en total. Me encontraré hecho huesos. Y si antes me juzgaba por ser demasiado delgado, ahora sería mucho peor. Y comenzaba a preocuparme, ¿Desde cuando los pastelillos me daban algo de asco?. Finalmente me decidí por un simple café.

Se que en estos momentos no tenga ánimos y las personas a mi alrededor me vean tirando amargura a mi alrededor, pero se que todo cambiara cuando aquella persona se sitúe frente a mí. Quizá lágrimas, risas, sollozos. Nunca se sabe... Simplemente estaba ahí, sin hacer nada. Saqué mi teléfono y me sorprendí al momento en que vi todas aquellas notificaciones. Justo al salir de mi burbuja me acorde de que personas se preocupaban por mi.  Y más fue mi sorpresa al momento en que Mario me propuso el vivir con Miami. Y todo esto se debe a que en el estudio donde trabaja se ocupan más cantantes para su debut. Sonreí a tal propuesta, ¿Cómo se lo tomaría Nicole?. Imagino que bien, finalmente demostrará a más persona su talento...

"Lo pensaré y consultaré con Nicole, gracias por avisar, se que lo tomará gustosamente." -Enviar.

Con ese mensaje me encontraba feliz. Sí es que así se cataloga, últimamente no son mis días muy "felices". O quizá no del todo.

Los minutos siguieron pasando, encontrándose eternos a mi parecer. Deje aquel recipiente que anteriormente contenía café, sobre el contenedor de basura. Lleve mis dedos cuidadosamente a mis sienes, haciendo masajes cuidadosos para no lastimar más aquella zona la cual ya tenía afectada. Cerré los ojos ligeramente ante el acto, provocando una sensación de relajación, entrando en profundos pensamientos. Los cuales fueron interrumpidos por una voz femenina. Aquella voz única la cual me puede sacar de pensamientos de ese tipo. Por una parte me estaba diciendo loco, tal me obsesione demasiado, tanto que todo mi mundo gire con su voz. Y otra parte de mi quisiera que abriera los ojos y confiara en esa idea.

"¿Quieres que te ayude?" -Repetía una y otra vez mi cabeza con ese tono de voz.

"Parece que no soy bien recibida." -Volvió a escucharse de mi la misma manera.

Abrí los ojos instantáneamente mirándola frente a mí. Con un ligero puchero en sus labios al no captar mi atención. Verla de esa manera me gustaba, y siempre que tenia la oportunidad no me controlaba y tenía acciones iguales.

Me acerque a ella, y la abrace con ligera fuerza, aquel abrazo que necesitaba hace horas me fue saciado gracias a ella. Me separé un poco hasta quedar frente a frente, mirándola con los ojos cristalizados. Supongo que yo debo estar igual, o peor. Tome sus mejillas y me acerque hasta sus labios, transmitiendo nuestro amor mutuo de manera lenta. Justo en esos momentos, necesitaba que el mundo parará y nunca siguiera con su ciclo. Seguir con aquel beso durante largos ratos, hasta que mis labios se encuentren completamente hinchados. Pero valdría la pena. Nuevamente me separaré sin dejar de contemplar sus ojos. Pose sus cabellos tras su oreja los cuales no dejaban seguir apreciando dicha anatomía. Una lágrima recorrió sobre sus mejillas, acercándome al instante a detener su recorrido con mis labios. Nuevamente me envolví en sus brazos comenzando a sollozar cual niño a su madre. 

¿Drama?. Estas escenas serían unas de las mejores y más exageradas en la historia, una de las cuales me encantaría tomar junto con Nicole. 

Y aunque ese momento fuese extraño ya que nadie decía palabra alguna, me era más que suficiente tenerla cerca mía. Prefería mil veces eso, a una palabra. Envolverme en sus brazos, y cálidos besos que solo ella me podía brindar a cada momento. Ahora fue ella quien me separó y me perdía en su mirada durante ratos. Y eso cambió al momento en que sonrió y rompía el silencio.

-¿Estás bien?- Pregunte

-De maravilla.-

Está, dirigió su mirada a mi cabeza exigiendo una explicación. Yo sólo me limite a sonreír.

-Te contaré en casa, total también tengo muchas preguntes para ti.-

Me devolvió aquella sonrisa mientras asentía ligeramente. 

-¿Y Christopher?-

-él se encuentra bien.- Sonreí.- No podremos mirarlo hasta mañana y llevarla a casa dentro de una semana, lo están cuidando, y observando que no pase nada "raro".-


N/A

Gracias por aceptar las disculpas. 

Como dije, me encuentro de vuelta prometiendo seguir la historia y continuarla para que no pierdan el hilo de la trama. 

Espero que disfruten el capítulo. 7u7)9

Gracias. <Threz.




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