Joke.

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Narra Nicole.

Era un nuevo día, y como ya era costumbre, de mañana.
Al levantarme note que Jan no se encontraba al lado, y aunque eso ya se estuviera haciendo normal, no se escuchaba ruido alguno a comparación de cuando el ya se encuentra despierto.
Salí de las sábanas y de la habitación para dar un vistazo a Christopher, y al asegurarme de que se encontraba bien y dormido, baje en busca de Jan.
A pesar de que busque en cada rincón de la casa, simplemente no daba señal alguna de su presencia.

Suspire, aquellos intentos de búsqueda eran en vano y no favorecían en nada, solo una perdida de tiempo.
Quede parada durante unos minutos tratando de ver que hacer mientras espero a su llegada, pero la casa se encontraba limpia y sin necesidad alguna de realizar acciones dentro de ella.

- Casa limpia... ropa limpia... trastes limpios... -

En una larga lista, nada había por terminar. Todo se encontraba en buenas condiciones y comenzaba aburrirme.

Subí nuevamente al cuarto de Christopher con una libreta y un lápiz, sí algo era aprovechar el tiempo para mí mientras se encuentra dormido es escribir.
Continúe con la letras que deje a medias, e inconscientemente termino con aspectos relacionados a nuestro hijo.
Seguía ahí, sentada a su lado, hace tiempo que no era igual de aburrido, y comenzaba a fastidiarme.

Jan:
Baja...

Fue lo que alcance a leer en cuanto mi teléfono sonó. Una pequeña sonrisa invadió mi rostro a su llegada.

Baje con cuidado hasta la entrada principal, en donde Jan esperaba.

Abrí la puerta y esa sonrisa desapareció en cuanto me percate de que Jan no se encontraba ahí. Baja la mirada, y en segundos mis ojos se encontraban cristalizados.

Una ramo de rosas y una pequeña caja se encontraban ahí. Debajo una nota la cual en mano escrito decía; "¿Quieres casarte conmigo?"

Eres un tonto.- Pensé.

Literalmente me senté para presenciar aquel regalo. Tome las flores y las deje en mi regazo. Mordí mi labio, y tome el otro objeto faltante. Abrí la caja e inmediatamente las lagrimas salieron sin consentimiento alguno.
Vo unos zapatos conocidos frente a mí. Jan se agacho frente mío, abrazandome.

- Jan... yo... yo no te amo. -Bromeé.

Dejo de acariciar mi espalda y queda intacto. Justo en ese momento quería revolcarme tal gusano muriendo literalmente de la risa.

Se separo un poco de mí sin quitar las manos de mis hombros y me miro directamente a los ojos. Una lágrima recorrió mi mejilla

Dí una sonrisa victoriosa... Jan me debía demasiadas, aunque esta broma quizá sea demasiado.

-Idiota...- Murmure.

- ¿Huh?. -

- Que sí... sí quiero. -

-Pero ... Tú ....-

Una pequeña risa burlona salió de mis labios y eso basto para que Jan se diera cuenta de que era una broma. Casi se tiro encima mío, y de manera extraña reía y lloraba a la vez.
Ahora era él quien se encontraba llorando en hombro, tal vez de la emoción o del susto, pero me sentía satisfecha.

[...]

(?).

-Saranghae~

My life in Puzzle.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora