Damn.

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Narra Nicole.

Después de aquel encuentro optamos por ir a casa. De cualquier manera, y por mas que insistimos no fue posible el observar a Christopher por temas medicos, ya que tenia constantes chequeos para saber si era apto ir a casa con él, o seguir en revisiones constantes. y por más que lo lamentará, no llevaría a ningún caso seguir "rogando".
En el camino nadie articulaba palabra alguna. Eran simples sonrisas, tomadas de la mano, etc. Y nunca pensé ser tan empalagosa, pero junto a Jan todo cambia.
Jan estaciono el auto frente a casa. Di un gran suspiro al regresar todo a la normalidad, o eso creía pensar. Eso o saber que tendremos a una personita corriendo por todos lados.

Abrió la puerta y tomo mi mano para ayudarme a salir. Seguíamos en aquel silencio, pero para nada incómodo.

-¿Quieres comenzar la "entrevista" ahora?- Rio mientras entrábamos a casa.

Asentí ligeramente mientras nos sentábamos.
-Comienzo yo ¿?- Asentí. -¿Cómo supiste que seria niño antes de tiempo?-

Dí un gran suspiro. Realmente no sabía como contestar aquella pregunta. Ni si quiera yo me cuestione lo mismo cuando supe el sexo. Simplemente... ¿Paso?.

-Ni idea. Primeramente quise a un niño... criar a una niña es un poco ¿complicado?.- Reí.

Este me miro extrañado. Probablemente entendería aquella mirada. Toda madre quiere una hija, quizá el sepa eso.

-Extraño.- Murmuro.

Me limite a no decir nada. ¿Qué ganaría con eso?.

- ¡Oh!. Quiero hacer algo contigo... algo que tengo ganas hace mucho- Sonrió.

¿Qué podría ser?. Nunca lo sabes, Jan es como la gente dice: "Una caja de sorpresas."

Se acerco a mí y este comenzó a llevar su rostro a mi cuello. Lograba percibir su respiración constantemente haciendo ligeros estremecimientos. Segundos pasaron y lo que sentía era la mezcla de la acción antes menciona junto con sus labios. Depositando ligeros besos. Pero no permanecieron por mucho cuando subió, teniendo un corto pero eterno recorrido a mi lóbulo. El cual de la misma manera beso y mordió ligeramente. Me sonroje ante tal acto, puesto que Jan era diferente.
Se separo de golpe, y tomo mi mano invitándome a subir a la habitación. No puse objeciones y con mi cada ardiendo tome su mano.
En el trayecto ponía mi mano libre sobre mis mejillas, teniendo por efectivo mi gran tono rojizo. Jan reía divertido cuando me observaba. Y aunque no me pareciera gracioso le devolvía la sonrisa de manera nerviosa.

Llegamos a dicho lugar, entrando los dos a la habitación. Llego a abrazarme por la espalda, poniendo en descanso su mandíbula sobre mi hombro, y nuevamente sentí nerviosismo cuando daba besos en aquella parte. Recorriendo escalofrios por toda mi espalda. Comenzó a hacerme avanzar a lo que es la cama, dejándome en aquel sitio.
Se separo lentamente dirigiéndose a una caja, la cual abrió sacando dentro...un videojuego...

- He querido jugar esto contigo.- Sonrió -¿Quieres jugar?-

Comencé apretando mis puños, luego contando hasta 10, el cual se transformo en 20... 30. Y nuevamente me contenía por no aventar aquel objeto sobre su cabeza. Y por muchas ganas que tenía, no quería lesionarlo más. De ninguna manera llegaba a contenerme. ¿Quién te incita de esta manera, para después invitarte a jugar videojuegos?.

Es... es un tonto.

My life in Puzzle.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora