23. Problemas

2.9K 403 71
                                    



BECKY

:- Estás loca - dije mirando el arma de Freen que me apuntaba mientras ella me miraba enojada.

:- Sí, puede ser. No me conoces, puedo disparar en cualquier momento y donde me dé la gana - ella dijo bajando su arma a mi entrepierna.

:- !Por Dios, qué está pasando, Freen! ¡Suéltala, qué haces!- habló Marta, llegando a la sala asustada.

:- Que me voy de esta casa, eso es lo que pasa - dijo Freen soltándome bruscamente y guardando su arma. Tomó su maleta y salió por la puerta.

:- Becky- mi padre me llamó. Me detuve frente a la puerta y lo miré.

:- Que me dispare si quiere, pero no la voy a dejar ir- dije a punto de salir.

:- Te sugiero que no salgas a buscarla. ¿No la ves? Está hecha una furia- dijo mi padre. - Me decepcionas, hija. Tú y Kim. Pensé que habías cambiado-

:- Yo sí cambié, papá, por ella, porque la amo- dije enojada. No lo dejé decir nada más y subí a mi habitación. Tomé mi celular y llamé a Freen sin parar, pero no contestó ninguna de mis llamadas. Solté mi celular y di un suspiro molesto.

Me senté en el borde de mi cama, tratando de calmarme. Los recuerdos de los últimos meses pasaron por mi mente como una tormenta. Freen y yo habíamos superado tanto juntas. ¿Cómo habíamos llegado a esto?

Pasé la noche dándole vueltas a lo ocurrido, sin poder dormir. La preocupación y el enojo me consumían, pero sabía que tenía que intentar hablar con Freen de nuevo.

Al día siguiente, me levanté temprano y me dirigí al apartamento de Freen. Respiré hondo antes de tocar la puerta, esperando que me dejara entrar.

:- Freen, soy yo, Becky. Necesito hablar contigo-

La puerta se abrió bruscamente y Freen apareció, con el rostro aún lleno de ira.

:- ¿Qué quieres, Armstrong? ¿No te quedó claro ayer?- dijo con frialdad.

:- Solo quiero hablar, Freen. No podemos dejar las cosas así-

:- No hay nada que hablar. Te dije que me iba y lo hice. ¿Qué parte no entendiste? - replicó, cruzándose de brazos.

:- Entiendo que estás enojada, pero podemos solucionar esto. No quiero perderte- dije

:- Ya me perdiste, Becky. Ahora vete antes de que pierda más la paciencia- dijo, cerrando la puerta en mi cara.

Volví a mi oficina con el corazón apesadumbrado. Nada había salido como esperaba y me sentía más frustrada que nunca. Al llegar Kim notó mi estado de ánimo.

:- ¿Todo bien, señorita Armstrong? -preguntó con una mirada preocupada.

:- No, no está bien, pero no es algo de lo que quiera hablar ahora- respondí, tratando de mantener la compostura.

Kim, siempre atenta y amable, se acercó un poco más.

:- Si necesitas algo, aquí estoy- dijo, con una voz suave y un toque en mi brazo.

:- Gracias, Kim. Lo aprecio- susurré mirándola a los ojos.

Antes de que pudiera reaccionar, Kim se lanzó sobre mí, besándome apasionadamente. Al principio, me quedé inmóvil, sorprendida. Pero el enojo y la frustración tomaron el control y le correspondí el beso.

:- Becky, no sabes cuánto he esperado esto- murmuró Kim entre besos.

:- Kim...- intenté decir algo, pero las palabras no salían.

MI GUARDAESPALDAS || FREENBECKY (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora