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Me despierto sin el sonido de la alarma, un rayo de luz que entra por la ventana me saca de mi sueño. Estoy sola en la cama, me invade la extraña sensación de tristeza. Miro la mesa de luz, arriba hay una nota. Estiro mi brazo para agarrarla.

"Hagamos esto más seguido. -S"

Sonrío. Salgo de la cama despacio y veo mi cuerpo en el espejo unos segundos, los sellos no han desaparecido aún, me pregunto cuanto tiempo más pasará hasta que se oculten. Busco ropa cómoda para entrenar y me cambio, se siente bien poder mostrar mis brazos al menos. Bajo al comedor y agarro una manzana, la devoro mientras abro las ventanas para sentir el ambiente frío de la mañana. Una vez que termino de desayunar, me lavo los dientes y peino mi cabello. Me acerco al florero y siento un aroma muy dulce desprenderse de los finos pétalos. Salgo de casa con una sonrisa.

—Buen día —dice Kakashi.

Lo veo con una mano arriba y los ojos cerrados, seguramente por una expresión alegre bajo la máscara.

—Buen día —respondo mientras me acerco.

Comenzamos a caminar hacia el campo de entrenamiento con bastante calma. La aldea se siente vacía, no hay muchas personas despiertas a esta hora. No hablamos, lo que le permite a mi mente ponerse a trabajar. Pienso en las palabras que me dijo anoche.

El clan Uzumaki es conocido por su fortaleza y vitalidad.

Quizás Orochimaru lo sabía y por eso me enviaba a tantas misiones peligrosas. Pienso en Karin un segundo antes de que Sakura se nos una, luego Sasuke se hace presente y por último Naruto. Kakashi se detiene en el puente que está antes de comenzar el descampado, lugar donde nos encontramos siempre, y gira.

—Me encantaría entrenar con ustedes hoy —dice—. Pero Lord Hokage ha designado una misión para el equipo 7.

Lo miro confundida. Me intriga su elección de palabras, ¿por qué no dijo "nos ha designado una misión"? Suena a que se desentiende del equipo.

—¿Otra misión? —pregunta Sakura un poco sorprendida.

Asumo que no es normal que reciban tantas misiones en un corto período de tiempo. Para mí esto no es muy extraño, los últimos dos años de mi vida estuve constantemente realizando "misiones", con uno o dos días de descanso entre cada una.

—Así es. No se preocupen, no será nada peligroso. Solo deben entregar un paquete en la Aldea de la Hierba.

¿Deben?

—¿Hm? ¿Aldea de la Hierba? —pregunta Naruto.

—Es una aldea fundada hace relativamente poco —digo—, es la más reciente de la nación.

—Eso es verdad —añade Kakashi—. Es la primera vez que sus ninja participan de los exámenes Chunin, por eso el equipo 7 debe entregarles un paquete con información sobre el mismo, y algo más...

—Ya basta —exige Sasuke en un tono bastante molesto—. Equipo 7, equipo 7. ¿No vendrá con nosotros o qué?

Kakashi lo observa sin demostrar enojo o sorpresa.

—No, no iré —responde.

Lo sabía. Mi padrino es muy cuidadoso con sus palabras. Bien, entonces, si él no vendrá...

—¿Quién estará a cargo de la misión? —pregunto.

Él gira su cabeza y me mira directamente a los ojos. No parpadea, no titubea. Es como si hubiese estado esperando que alguien hiciese esa pregunta desde hace tiempo.

Entre sombras y recuerdos (Naruto Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora