Entre sombras y recuerdos (Naruto Fanfic)

24

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Alrededor de las cuatro de la tarde, llegamos a la dichosa aldea. Tal y como su nombre lo dice, hay mucha vegetación en todas partes. Las casas están hechas de madera y la tierra es tan fértil que cada diez pasos vemos algunas verduras creciendo de forma desorganizada en plena vereda. Katsumi camina detrás de nosotros, la he notado algo tensa desde que entramos, me giro para verla y noto que sus ojos se mueven de un lado a otro sin dejar pasar ningun detalle, está observando todo y a todos de manera minuciosa. Imagino que quiere asegurarse de que estamos a salvo, así que confío en ella y decido no preocuparme. Estando a media cuadra del edificio central, veo al Kazekage de pie detrás de un grupo de personas.

—Bienvenidos —nos dice una mujer.

No solo nos estaban esperando los miembros del consejo, hay varias personas, aldeanos, viéndonos con mucha curiosidad. Katsumi se coloca delante de nosotros, emana cierta confianza en sí misma, aunque me doy cuenta de que está fingiendo. La conozco demasiado bien.

—Le agradecemos.

La mujer le da una sonrisa falsa y nos guía por las calles hasta una de las casas, cruzamos por lo que parece ser un patio interno hasta nuestras habitaciones, veo como le dice algo a nuestra líder antes de desaparecer detrás de una puerta.
Naruto, Sakura y yo esperamos que ella se acerque antes de dar otro paso. Me tomo unos segundos para verla caminar. Mis compañeros lucen tranquilos, despreocupados.

—Bien, pueden acomodarse y ducharse si quieren. Nos llamarán para cenar en unas horas.

Asentimos. Naruto es el primero en entrar al cuarto de los chicos. Camino unos pasos detrás de él. Lo escucho sorprenderse y quiero apresurarme a entrar también.

—¿No vienes? —escucho preguntar a Sakura.

Me detengo y doy un paso hacia atrás, veo que Katsumi dejó su mochila y está caminando hacia afuera.

—Me han pedido que entregue los pergaminos ahora, deben estar ansiosos —dice de espaldas—. Descansen un poco.

Me resigno a entrar, ella estará bien. Naruto acomoda sus cosas a los pies de una de las camas y se acuesta después de dar vueltas unos minutos. Yo tomo una ducha para relajarme y sentirme limpio. Cuando salgo del baño noto que mi compañero está durmiendo, me visto intentando no hacer ruido para no despertarlo. Miro por la ventana, está comenzando a anochecer y no escuché que Katsumi haya regresado. Salgo del cuarto, notando los ninja que están vigilando, pero sin alarmarme, y golpeo la puerta de las chicas, esperando que la muchacha rubia salga, pero no tengo suerte.

—¿Ha vuelto? —pregunto aunque ya sé la respuesta.

—No, aún no, Sasuke. ¿Necesitas algo? Quizás pueda ayudar —se ofrece dando unos pasos hacia el frente.

—No, está bien. Solo quería hablar con ella —respondo sin preocuparme por sonar amable.

Sakura parece algo triste, aunque esa expresión se está volviendo usual en ella. Escucho pasos en el pasillo, volteo y me encuentro con la inconfundible figura de Katsumi caminando hacia nosotros. Debo admitir que luce bastante cansada, lo que es entendible ya que no durmió nada anoche.

—¿Todo en orden?

—Ahora sí —respondo.

○

Nos llaman a comer poco tiempo después de haberle entregado los pergaminos y demás.
Me pareció extraño que no hayan querido esperar a mañana para eso, y además, todo se sintió muy tenso, estoy segura de que no les caigo bien, no dejaban de mirar mi banda, lo que me resultaba muy incómodo.
Somos guiados por la misma mujer que nos recibió, los chicos caminan delante de mí. Presto atención a cada detalle, cada ninja, cada guardia que veo, sus ojos están fijos en mí así que intento no llamar la atención, me pregunto si los chicos los habrán notado.
Suspiro al pensar que esta noche dormiré poco, quiero comenzar a investigar cuanto antes aprovechando que está oscuro y puedo escabullirme mejor, pero eso no quita el hecho de que estoy muy cansada.
Entramos a un comedor que exhibe una mesa repleta de comida solo para nosotros cuatro.