Entre sombras y recuerdos (Naruto Fanfic)

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Llevo a Naruto inconsciente en mi espalda. Decido no usar más chakra para incrementar mi fuerza y ser más veloz, algo me dice que voy a necesitarlo después, aunque es cierto que la aldea está bastante lejos.
Pakkun se nos une luego de unos kilómetros y luego Kakashi. Sonrío cuando lo veo, pero no puedo mantener esa expresión por mucho tiempo.

—¿Necesita atención? —me pregunta.

—Estará bien —le respondo.

Es como yo. Su cuerpo sana de forma rápida, y no solo por su genética, también por el zorro.
Gracias a Lady Tsunade y a los estudios que hicieron en mí, pude descubrir que el chakra rojo de Kurama se mezcló completamente con el mío, lo que le da ese color tan peculiar. Y cantidad descomunal de chakra que poseo fue solo suerte, ya que solo mi madre provenía del clan Uzumaki. Tsunade dijo que podía investigar si tengo algún parentesco real con Naruto, pero preferí no hacerlo. Es mejor dejar ese pasado atrás.

—No podías detenerlo, ¿cierto?

Me sobresalto. La pregunta de mi padrino me deja en blanco. Suspiro. No puedo ocultarle esto, me consumirá por dentro.

—Él tomó su elección. Si lo arrastraba de regreso, no iba a pasar mucho tiempo hasta que quisiera marcharse de nuevo. Lo sabes. Era dejarlo ir...

—O matarlo —dice terminando mi oración—. ¿Cuál es la versión oficial?

Lo miro por unos segundos. No parece enojado conmigo.

—Ya se había ido para cuando llegué.

Asiente. Continuamos el camino por varios minutos en silencio. Pakkun desaparece al ya no ser necesaria su habilidad de rastreo.

—¿Dudaste? —me pregunta.

Sonrío.

—¿Recuerdas lo que dije luego de nuestro encuentro con Orochimaru?

—Él tiene razón. Tú y él tienen una conexión especial. Sabías que él estaba en peligro, eso... me preocupa, Katsumi.

—Es cierto, estamos entrelazados de alguna forma. Pero sabía lo que estaba pasando porque creé una conexión real usando mi chakra. —Me mira no muy convencido—. La romperé... y no te preocupes, Sasuke no irá a buscarlo.

—Pero si lo hace, tú sí lo seguirías, ¿verdad?

—Créeme que mi cariño por Sasuke es grande, pero no lo suficiente para traicionar a mi aldea.

El hecho de que Sasuke se haya distanciado de mí solo hizo mis prioridades fuesen más claras. Kakashi asiente sin mirarme. No hablamos más hasta que el joven Uzumaki despierta algo confundido.

—¿Katsumi? ¿Kakashi Sensei?

Silencio. Dudo si debería hablar.

—Diste lo mejor, niño —digo intentando reconfortarlo.

No dice nada. Sé que no hay palabras que lo hagan sentir mejor, como tampoco hay palabras para sacarme esta angustia que siento.

—¿Y los otros? —pregunta.

—No lo sé... Lady Tsunade me mandó a buscar refuerzos en la Aldea de la Arena. Estaba volviendo a casa cuando te encontré.

Unos kilómetros antes de llegar a la aldea, un ninja médico nos intercepta.

—¡Katsumi! —grita—. Lady Tsunade requiere tu presencia urgentemente. El equipo de Shikamaru ha vuelto.

Me sobresalto y también me detengo en seco, el tono de esa última oracion no me gusta. Veo a mi padrino. Él sostiene a Naruto que se encuentra dormido otra vez.