40

26 3 0
                                    

—¿Estás lista?

Levanto la cabeza de mi libro para ver a la Quinta Hokage. Ella tiene una sonrisa en su rostro que emana cierta confianza y esperanza. Yo, por otro lado, estoy muy nerviosa.

—Eso creo, Lady Tsunade.

No he pasado muchas semanas como su alumna, aún tengo mucho para aprender. Dejo mi libro sobre el escritorio y camino hacia la puerta junto a mi mentora. Nos detenemos antes de cruzar porque unas enfermeras que llevan a Lee a la sala de operaciones en una camilla.
Él me sonríe muy agradecido y yo intento lucir confiada.
Lady Tsunade es simplemente asombrosa, en cuanto vio todos los estudios que habían hecho sobre mi chakra por orden del difunto Hokage, se puso manos a la obra para buscar una solución al problema de Lee, y vaya que lo encontró.

—Vamos —me dice la Hokage.

Caminamos hasta el cuarto de esterilización. Todos están muy nerviosos y expectantes. Me visto apropiadamente para entrar a la sala de operaciones, Lee ya está bajo anestesia. Me coloco en posición y espero a que mi maestra ingrese.
Sigo algo nerviosa.

—Quiero que estés tranquila y concentrada, vas a usar más chakra de la que usaste alguna vez para restaurar sus músculos —me dice.

Asiento. Lo sé, ya hablamos de ésto y estoy dispuesta a hacerlo. Los días de ninja de Lee aún no terminaron, puede llegar mucho más lejos y me siento feliz de poder darle la oportunidad de demostrarlo. Comencemos.

Mis compañeros están en la habitación. ¿Por qué siempre soy yo quién termina en el hospital? ¿Es que no soy tan fuerte como creo? Cierro las manos, ese pensamiento me hace enojar. Veo al rubio con odio.

—Naruto, enfréntate a mí.

Sus ojos azules se expanden más y más. Estoy cansado de que siempre sea él quien salve el día, estoy cansado de estar bajo su sombra. Este perdedor no puede ser más fuerte que yo. Es un insulto para mi clan.

—Cuando quieras —responde con expresión seria.

Caminamos hacia el patio interno, cada uno es direcciones opuestas. Aún no sé por qué Sakura nos sigue. Si quiere detenernos, no lo logrará. Veo a mi oponente y comienzo a correr hacia él mientras creo el chidori. Dos clones concentran chakra en su palma, es ese jutsu de nuevo. Cuando termina, sus clones desaparecen y corre a mi encuentro.

—¡No! —grita Sakura.

Antes de que nuestros ataques se encuentren, siento que una mano que me sujeta por la muñeca y me hace girar en el aire. Me estrello contra un tanque de agua. ¿Qué pasó?
Muevo mis ojos y los veo. Kakashi y Katsumi Hatake. Así que ellos desviaron nuestros ataques.
Veo que Naruto corrió la misma suerte y también se estrelló con un tanque de agua. La diferencia es que su ataque fue muy inferior al mío. Sonrío al notar eso.

—¿Realmente ibas a atacar a Naruto con el chidori? No te lo enseñé para que lo uses contra un camarada de la aldea.

Veo a mi sensei. No me importa con qué objetivo me lo enseñó, ahora yo puedo hacer lo que quiera con él.
Veo a Katsumi, está de espaldas a mí. Se tambalea, está por caer de espaldas. Me muevo velozmente por impulso y la sostengo. No puedo ver sus ojos, están cerrados. Luce terriblemente exhausta.

—¿Qué le pasó? —pregunto esperando alguna respuesta.

Naruto se acerca. Veo como Shizune corre hacia nosotros muy preocupada.

—¡Katsumi!

En cuanto la ve en ese estado deja salir un grito ahogado y se tapa la boca con ambas manos. Sakura también se acerca a nosotros, seguramente curiosa por saber qué ocurre con la rubia.

Entre sombras y recuerdos (Naruto Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora