Fanfic del anime "Naruto" (2002).
Ella tiene un pasado complicado y oscuro. Ha regresado a la aldea y sus memorias la atormentan constantemente. ¿Conseguirá encajar y dejar todas esas cosas que la perturban de lado para por fin ser feliz?
Un par de días han pasado. Los chicos han estado entrenado incansablemente hasta ayer. Sasuke, por su parte, me ha pedido ayuda con algo de vergüenza y hemos estado viéndonos a escondidas para los entrenamientos. Admito que la mirada de Kakashi sobre nosotros cuando estamos juntos me resulta graciosa, se preocupa como un padre. Quizás así hubiese actuado mi padre si estuviese aquí. Aunque, pensándolo bien... La actitud de Sasuke hacia mí ha cambiado un poco. Estoy esperando pacientenmente a que lleguen los chicos.
—Kakashi —lo llamo sabiendo que está unas ramas más arriba.
Siento su inconfundible chakra. Pienso en eso, ¿desde cuándo puedo identificar a las personas por su chakra? Aparece en la misma rama en la que estoy yo.
—¿De verdad crees que podrá lograrlo? —pregunto algo preocupada.
—Depende de ella.
Esa respuesta no me deja muy tranquila. Veo que los chicos se acercan a la vereda, salimos rápido del árbol para acompañarlos. Sakura emana cierta confianza, lo que me parece extraño. Caminamos un rato juntos, no hablo mucho.
—Los veré mañana —digo antes de marcharme.
No estoy tranquila. Siento una profunda presión en el pecho, angustia y algo de ansiedad. Están aquí, lo sé. Sólo es cuestión de tiempo antes de cruzarme con ellos, y siendo sincera, no sé si eso sería lo más conveniente.
●
Kakashi Sensei se despide y desaparece también. Dejo a Sakura y Naruto para buscar a Katsumi, no entiendo por qué se fue tan repentinamente, algo debe estar mal, la noté preocupada. No consigo alejarme mucho, ya que escucho gritos de mi compañero a unos metros y la curiosidad me gana. Corro en dirección a los gritos y trato de no hacer ruido mientras me coloco detrás de una cerca de madera para observar la escena por un orificio.
—¡Déjalo ir! Es solo un niño.
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Hay dos ninja de la Aldea de la Arena, una chica y un chico, deben ser dos o tres años más grandes que nosotros. El grandote sujeta al nieto del Tercer Hokage por la bufanda mientras que Naruto lo amenaza para que deje al niño tranquilo, pero no hace nada para detenerlo. Sakura no habla, pero puedo notar que está molesta con la situación y hasta parece que tiene miedo. Ni siquiera se percatan de que estoy aquí, tomo unas piedras y salto a un árbol que se encuentra de mi lado de la cerca pero es lo suficientemente alto para que ellos me vean. Le arrojo una a la mano y suelta al niño.
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