Pecado mortal #1 (Sags: Secretos Oscuros).

CAPITULO 5.

Días antes.

Venus:

Antes de aterrizar en Italia me tomé una pastilla para el dolor de cabeza, que se me quitó un poco y eso lo agradezco o si no me iba a poner de muy mal humor, no soportaba y no soporto ver aún la luz del sol y los ruidos fuerte y tengo una sed, que sería capaz de tomarme un tanque de agua.

Vamos camino al hotel donde nos quedaremos, no pretendo salir hasta mañana así que podré dormir plácidamente, si es que katerine me lo permite.

— Está noche saldré, ¿Quieres venir conmigo?. — pregunta Kate.

— No gracias, pareciera que me voy a morir y tú quieres que salga contigo.

— Ay solo decía, pero si te interesa la propuesta sigue en pie.

— Lo pensaré. — miento.

No pensaré nada, aprovecharé este poco tiempo alejada de mi padre y de Jhon, para convertirme en otra mujer y para crecer más como persona, ya no seré la misma tonta de antes, en este momento llega la nueva Venus Nowak. Una mujer que no se quebrara como antes. Ese es mi propósito y espero cumplirlo.

— Que harás cuando llegue la fecha de tu boda, ya no podrás escapar más de ese maldito infierno, bueno a menos de que te escapes, yo te podría ayudar.

— Hay Katerine, no es necesario hacer eso, tal vez mi amado se canse de mi, y decida no casarse conmigo, todo puede pasar. — digo con voz siniestra.

— Me das miedo, pero si tienes un plan en mente te ayudaré, cuentas conmigo siempre.

— Lo sé siempre.

Llegamos rápidamente al hotel y yo soy la primera en bajar de la camioneta, el clima en este lugar es perfecto, caluroso, no como en Polonia que hay veces donde hace frío como en el polo norte. El chófer que Kate contrato para nosotras está bajando las maletas mientras que ella está hablando con Derek pidiéndole no se que cosas aquí en Italia, ya que el es de aquí así que conoce mucho mejor este lugar, sigo observando todo a mi alrededor, pareciera que nunca hubiera visto el mundo, pero es que estoy impresionada este lugar es hermoso aunque esa palabra le queda grande, si no me caso creo que me vendré a vivir a este lugar, aquí se respira paz.

— Como te parece San Vito Lo Capo. — la voz de Kate me saca de mis pensamientos.

— Pensé que estábamos en Italia.

— Cualquiera pensaría eso pero no estamos en un lugar maravilloso de Sicilia.

Bien, eso me pasa por preguntar San Vito Lo Capo, como olvidar ese nombre.

— Te tengo que decir que me encanta este lugar.

— Pues este lugar tiene cosas maravillosas que deslumbran a cualquiera y no hablo de paisajes querida.

— ¡Oye!, tienes novio.

— Mejor entremos al hotel.

Estamos esperando que nos asignen nuestras habitaciones, hay muchísima gente en este lugar, creo que es temporada de vacaciones, esto es un poco aburrido, me van a nacer raíces y voy a quedar pegada al piso de tanto esperar, menos mal que se me fue el dolor de cabeza si no estuviera a punto de explotar de rabia.

— Su nombre señorita. — la recepcionista empieza a hablar con Kate.

Otro momento de espera. Esperar y esperar.

— Su habitación con la señorita es la 306, la suite más exclusiva, espero que la pasen bien aquí en Italia. — dice sonriente la recepcionista.

El chófer se encarga de subir las maletas a la habitación, mientras nosotras seguimos mirando el lugar, me preguntó de a dónde habrá sacado katerine a ese pobre hombre, para hacer ese trabajado que se ve duro le debe de pagar bastante dinero.