CAPITULO 26.

330 22 5
                                    

Salvatore:

Aún tengo acumulada la rabia de hace un rato, cuando el puto guardia quiso llamar puta a mi mujer, si no fuera porque es uno de los mejores ya estaría con la boca llena de moscas, es un maldito por abrir de más la boca. Además para completar el asunto tengo que soportar las miradas de los imbéciles a mi mujer, algo que no me gusta por esos hice que se corriera el rumor de que Venus es mi mujer, no quiero que nadie la toque y mucho menos la mire, aunque no puedo negar que me gusta como le quedó eso vestido, por eso le pedí que se quitará el abrigo, la queria ver, a pesar de que casi me da un infarto, pense que ese vestido era ajustado. Pero lo que más me tocó las pelotas fue que Venus resultará con eso de no permitirme tener sexo con ella hasta que no nos casemos, algo que no voy a cumplir, soy un pecador al igual que ella, pero puede pasar un milagro, porque no sería santo pisar un lugar tan puro como una iglesia, aún más cuando llevas muertes encima.

Estoy analizando sigilosamente a Edwin, mientos yo estoy cómodo aquí sentado en el maldito sofá, en este momento no me fío ni de mi sombra y mucho menos de un hombre que apenas conozco, aunque sea el papá de mi mujer, con Ana todo fue distinto, algo en ella demuestra paz, algo que no quiero ni me interesa descubrir, ya tengo suficiente con el amor que me da mi mujer, no quiero conseguir el de una madre, porque ya perdí a la mia. Eso es una mierda que siempre vivirá en mi, por eso quiero que mi hijo tenga todo y que siempre tenga claro que su madre y yo estaremos para el, que no me tema, como yo le temía a ese hombre o bueno a mi supuesto padre, pero con el tiempo cambie, en mi no hay piedad y mucho menos para el, porque el destruyó todo en mi y mi familia.

“— Si el te llega a encontrar y te pregunta algo, no le respondas, ni lo mires a los ojos, me entiendes—”.

Las palabras de mi madre son como un detonante y un motivo más para matar a ese hombre. Porque el pudo haber hecho mucho por mi, pero no lo hizo, me dejó solo, pero yo seré diferente con mi bebé, arriesgaría todo por el y por mi mujer, no me importa volver a ser un vagabundo con tal de tenerla a salvo.

Pero mejor dejo atrás esos pensamientos, que solo son el recordatorio de un pasado que ya está enterrado, bueno solo le falta un muerto. Pero tengo que estar bien para mí mujer. Ella está muy feliz hablando con su padre, les di su espacio, necesitan hablar muchas cosas, mierda, no se compara esa sonrisa angelical con nada, cuando mira a su madre o a su padre brillan sus ojos color mar, porque joder, el embarazo le ha sentado de maravilla, no me la imagino en unos meses, sus pechos tendrán leche y estarán más grandes, mierda, de solo pensarlo me pongo duro.

Y debo aceptar que la idea de compartir a mi mujer con otro hombre no me gusta para nada, pero me tengo que tragar mis putas palabras porque del hombre en cuestión es su padre y yo no puedo prohibirle a Venus que no lo vea, sería muy egoísta de mi parte, a la mierda, soy un maldito egoísta que la quiere poseer para siempre. Tenerla encima de mi, escuchar su dulce voz, tener sus brazos y sus besos, por Dios, esa mujer es mi perdición y la única capaz de hacer que yo pierda la cordura.

Venus se acerca a mi, viene con una sonrisa, creo conocerla algo me va a pedir. — Amor. — dice, mientras se sienta en mi regazo, mierda, me gusta que me diga así, me dan ganas de follarla y me importa mierda lo que piensen mis hombres ellos no tienen derecho a pensar algo sobre mi mujer.

— Algo quieres, ¿Verdad?. — digo.

— Quiero que mi padre pueda ir a ver a mi madre, le dará felicidad verlo, además la casa es muy grande, hay espacio para el y para mí mamá. — me dice ella, mientras me rodea con sus pequeños brazos, definitivamente me tiene en sus manos.

— Es tu casa, yo no tengo nada que opinar ahi, puedes llevar a quien quieras, eso sí que no sean hombres, a excepción de tu padre. — le advierto, es lo único en lo que no cederé ante ella.

Pecado mortal #1 (Sags: Secretos Oscuros).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora