"El peor sentimiento no es estar solo. Es ser olvidado por alguien que tú nunca vas a olvidar"
- KookV
- doncel.
- distorsión de edades.
- m-preg.
- mención de otras parejas.
- pura ficción.
《Queda prohibido cualquier tipo de copias o adaptacion...
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¿Triste?, triste debe ser para muchos darse cuenta que no se es tan importante para una persona como se piensa. La diferencia radica en que una parte de mi siempre lo supo; y por ese hecho no es tristeza lo que siento, en verdad no sé lo que es.
-Jeon Jungkook.
Mientras veía al guardaespaldas de Taehyung alejándose entre la gente, Jeon se quedó estático en su lugar repensando las últimas palabras que dijo el hombre.
Entre ellas: "Te he estado investigando.."
¿Cómo debía tomar eso? ¿Se supone que debería asustarlo?.
Lo expresó con un tono de voz repleto de desdén, como si él fuera una especie de basura inhumana, un pedazo de objeto desechable que despreciaba a causa de conocer sus más oscuros secretos. Min tenía muchos aires de grandeza y superioridad, y aunque no las demostrara estando junto a Taehyung, esas actitudes salían a flote cuando debía relacionarse con otras personas en ausencia de este.
De más estaba decir que aborrecía su presencia.
Es ese tipo de hombre que da la impresión de ser correcto, o perfecto. Cree que todo lo que hace, dice o piensa es lo que se debe hacer porque está bien hacerlo.
Actúa como si nunca hubiera cometido un error en su vida.
Jungkook bajó la vista resignado, miró la arena en sus zapatos y terminó por sentirse increíblemente patético. Max a un lado suyo se sentó en su lugar y aquella colita impaciente dejó de ser agitada, ya no estaba feliz, al igual que el azabache se quedaron terriblemente quietos. Jeon contempló en su inquietud la inmensidad de la playa y lo verdaderamente chico que se sintió al encontrarse solo y de esa manera.
No fue hasta que Jungkook reanudó su paso que el cachorro no se movió. Los dos caminaron lento, el humano estaba perdido mentalmente y el animal lo seguía sin despegarse de su lado. A pocos pasos de llegar a la calle, divisó a Yoongi sacando un brazo por la ventanilla, y haciendo un gesto con dos dedos que supuso fue una orden para que el resto de los autos negros en los que habían llegado los guardias avanzaran. Y lo confirmó cuando en segundos, todos ellos se pusieron en marcha dejándolos a él y al perro a su suerte.
Por un instante creyó ver los ojos preocupados de Taehyung a través de la ventanilla de uno de esos coches lujosos mientras ya estaban en movimiento. Sin embargo, se convenció de que sólo era una alucinación de su mente queriendo que fuera real, ya que era imposible verlo; todos los vidrios de los autos eran polarizados.