Los Tesoros Del Norte. (Capitán Tsubasa)

26#Secretos Compartidos y Futuros Prometedores

Narrador omnisciente:

-La noche se extendía sobre la ciudad, un velo de tranquilidad que contrastaba con el torbellino de emociones que las hermanas Lunargentum y los hermanos Crepusculum llevaban en sus corazones. Tras revelar sus secretos y confirmar sus lazos de imprimación, cada uno regresó a su hogar, donde las conversaciones fluirían hasta el amanecer.

En la habitación de Flor:

-Las hermanas se congregaron en la habitación de su hermana mayor Flor, un refugio de intimidad y comprensión. La habitación estaba bañada en la luz cálida de las velas, y las sombras danzaban en las paredes mientras las hermanas se acomodaban en un círculo de confianza:

Flor: Nunca imaginé que sentiría tal alivio al compartir nuestro secreto. Es como si hubiéramos estado llevando una carga que no sabíamos que pesaba tanto-Confesó, su voz temblando de emoción.

Maki: Yo tampoco. No puedo creer que al fin haya pasado. Nuestro secreto, todo lo que hemos guardado, está al descubierto-Coincidió, su mirada reflejando una mezcla de alivio y alegría.

Wendy: Sí, y de alguna manera, siento un alivio inmenso. Como si un peso se hubiera levantado de nuestros hombros-Asintió con una sonrisa radiante, su espíritu indomable brillando.

Yoshiko: Es verdad, siento como si una parte de mí siempre lo supiera. Que no podríamos, ni deberíamos, llevar este secreto solas para siempre-Añadió, su voz llena de sinceridad.

Yukari: Es liberador, pero también aterrador. ¿Cómo cambiará esto nuestra relación con ellos?-Cuestionó pensativa, frunciendo el ceño mientras sus ojos buscaban respuestas en los rostros de sus hermanas.

Sanae: Cambiarán, sí. Pero somos fuertes, y ahora tenemos el apoyo de nuestra familia. Eso significa todo-Declaró con determinación, levantando el mentón como si estuviera lista para enfrentar cualquier desafío.

Yayoi: Y lo más importante es que ellos nos corresponden. Nuestros sentimientos son mutuos, y eso es más de lo que alguna vez soñé-Comentó con alegría, una chispa de entusiasmo brillando en sus ojos.

-La conversación fluyó hacia el futuro, hacia lo que significaría para ellas como parejas. Hablaron de sus esperanzas y miedos, de los desafíos y las alegrías que les esperaban. Pero por encima de todo, hablaron del amor que sentían, un amor que ahora era libre de expresarse. A pesar de la incertidumbre, una cosa era segura: estaban juntas en esto, unidas por un vínculo inquebrantable.

En la casa de la familia Crepusculum:

-Los hermanos Crepusculum llegaron velozmente a su hogar, un lugar que resonaba con la sabiduría de los siglos. Aurelia y Jasper los esperaban, sus rostros serenos pero llenos de preguntas:

Genzo: Madre, padre, hemos compartido nuestra verdad con nuestras parejas eternas, y ellas nos corresponden-Informó con una sonrisa que no podía ocultar, el brillo en sus ojos revelando su felicidad.

Aurelia: Mis queridos hijos, eso es maravilloso. Pero deben recordar ser cautelosos. El amor como el suyo puede traer tanto alegría como desafíos-Dijo mientras abrazaba a sus hijos uno por uno, su voz impregnada de amor maternal.

Jasper: Estoy muy feliz por ustedes, hijos, pero su madre tiene razón. La prudencia es clave, pero no dejen que el miedo les impida vivir este amor. La vida es demasiado corta, incluso para aquellos de nosotros que la vivimos más tiempo-Añadió con su habitual sonrisa tranquila, el calor de sus palabras envolviendo a sus hijos.

Taro: Gracias, mamá, papá. Entendemos, y seremos cuidadosos. Pero nuestro amor es demasiado fuerte para ocultarlo. Es la verdad más pura que conocemos-Respondió con una sonrisa de felicidad, su corazón rebosante de determinación.

Ishizaki: Además, sus padres también están al tanto y nos apoyan. Esto podría significar un nuevo comienzo para todos nosotros-Informó al recordar aquel detalle, su voz llena de esperanza.

Aurelia: Eso es una buena señal. Me gustaría mucho conocerlas. Si pueden y quieren, invítenlas a casa algún día-Pidió con su instinto maternal, su mirada llena de anhelo.

Tsubasa: Lo haremos, mamá. Sería un honor para nosotros traerlas aquí, para que conozcan el hogar que nos ha acogido-Respondió con una sonrisa llena de amor hacia su madre, sintiendo el apoyo en el aire.

Jun: Solo que...-Se calló un momento, su expresión tornándose seria-Tenemos que ser muy cuidadosos; no sabemos qué podrían hacer los del Clan Nocturne si se enteran-Comentó preocupado, su mirada grave.

Hikaru: Lo seremos. No se enterarán. Además, si se llegaran a enterar, enfrentaremos las consecuencias juntos y protegeremos a nuestras queridas lobas-Respondió con determinación, su voz firme como una roca.

Kojiro: Exactamente, ahora disfrutemos el momento-Coincidió, intentando aliviar la tensión en la habitación con una sonrisa.

-La conversación se prolongó, cada hermano expresando su gratitud y amor por sus parejas, mientras sus padres adoptivos ofrecían consejos y bendiciones. Hablaron de cómo sería el encuentro, de las palabras que compartirían y de los lazos que se fortalecerían.

Continuará...

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