Quiero ser más delgada, ponerme la misma ropa de las chicas de mi edad, no avergonzarme por ir en bikini o enseñar sin complejos mi ropa interior incluso a mi madre o hermana.
Quiero quererme tal y como soy.
Pero desde que era una niña no cumplo los estándares de belleza. No tengo el abdomen plano, la cintura de avispa, las piernas delgadas o los brazos fibrosos.
No puedo ponerme tops por mi barriga o llevar pantalones ajustados por la anchura de mis caderas. Evito vestir con tirantes porque tengo los brazos demasiado anchos y por supuesto, hace años que no me pongo bikinis. Las pocas veces que voy a la playa o a la piscina siempre llevo un bañador negro de lo más discreto.
No me gusta mi cuerpo, lo odio.
Me odio.
ESTÁS LEYENDO
Cartas de una chica suicida
Short StorySiento que a nadie le importo. Nadie me conoce de verdad, nadie conoce mis pensamientos. Ni siquiera yo misma. ¿Qué hago aquí? ¿Quién soy realmente? Solo una chica rota. Una chica suicida que escribe cartas.