El miércoles por la tarde la casa Montgomery se convirtió en un salón de belleza. La música juvenil de la época se escuchaba en cada habitación, junto a una secadora de cabello que posiblemente llevaba enchufada a la corriente más del tiempo estimado. La habitación de Rosalie y parte de la sala de estar estaban atiborradas por ropa y zapatos que evocaban a la década de los cincuenta.
Harry sintió que más que entrar a su hogar, acababa de llegar al infierno tras vivir un turno de doce horas en el hospital.
—¡Rosalie! —llamó él, intentando, en vano, que su voz se escuche por encima de la música.
Soltando un gruñido, Harry pellizcó el puente de su nariz y cerró sus ojos. Podía ser un vampiro, pero estaba cansado y solo quería descansar, y eso conllevaba a desear estar en absoluto silencio, porque la cabeza la iba estallar en cualquier momento.
El alcalde de los Montgomery irrumpió en la habitación de su hermana, a la cual encontró cantando frente al espejo de su tocador mientras terminaba de pasar la secadora por su cabello enredado en varios tubos. Harry nunca entendería los rituales de belleza de las mujeres. Simplemente nunca lo hizo y no se tomaría las molestias al hacerlo.
Rosalie finalmente apagó el secador y fue entonces cuando se percató de la presencia de su hermano. Ella no hizo otra cosa más que recibirlo con una radiante sonrisa y prosiguió en levantarse de su silla para quitarse la bata. Harry, si bien era su hermano y sabía que Rosalie no tenía pudor alguno al desnudarse frente a él, apartó la mirada y cerró la puerta detrás de él.
—¡Harry! —exclamo ella con alegría—. Pensé que llegarías más tarde.
«Sí, puedo verlo.» Pensó el ojiazul para sus adentros, mirando consternado el desastre de ropa que ella tenía en su cuarto. Él no pensaba limpiar todo en esta ocasión.
—Rosalie, temo preguntar—dijo él, alzando levemente su voz para hacerse oír por encima de la voz de Avril Lavigne—, pero ¿De qué va todo esto?
Rosalie se puso una blusa blanca de lunares negros y tomó un pantalón de cuero negro.
—Te lo dije, acompañaré a Ava a la fiesta de la escuela. Es con temática de los años cincuenta—esbozó una sonrisa burlona—. Parece que no han sido muy creativos. Nuestras generaciones también vivieron la misma fiesta en el mismo semestre.
No obstante, Harry no pidió encontrarle la gracia, especialmente cuando veía el comportamiento despreocupado de su hermana. Por lo cual caminó con decisión hacia el estéreo para bajar el volumen de la música. Aquello provocó la indignación y confusión de la joven rubia.
—¡Oye!
—Me dijiste que saldrías a otra cita con Ava—espetó él, intentando mantener la calma, pero le estaba resultando difícil hacerlo—. Nunca menciona un baile escolar.
ESTÁS LEYENDO
𝐒𝐀𝐏𝐏𝐇𝐈𝐑𝐄 𝐄𝐘𝐄𝐒 》the vampire diaries
Fanfiction𝗦𝗔𝗣𝗣𝗛𝗜𝗥𝗘 𝗘𝗬𝗘𝗦 ❛Tómame entre tus brazos para que pueda morir por segunda vez❜ Donde 𝐂𝐨𝐫𝐚 𝐁𝐞𝐜𝐤𝐡𝐚𝐦 llega a Mystic Falls escapando de la sombra de la muerte que la acecha y descubre un pasado tormentoso en su familia que cambiará...