Capítulo 17.

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El vientre ligeramente abultado pareciera que contaba con sólo cinco meses por el volumen que presenta, si los datos son correctos entonces el cachorro debe ser muy pequeño.

Xie Lian tiene un montón de sentimientos encontrados, se da cuenta también de la precaria situación en la que su primo debió haberse encontrado durante los meses en los que estuvo desaparecido.

La voz baja de Qi Rong se escucha después de un breve tiempo.

—Vete, quiero dormir. Estoy muy cansado.

No queriendo molestar más el descanso esperado por el omega en cinta se levanta del lugar en donde se encuentra de pie sin antes decir algunas palabras.

—Si necesitas alguna cosa, no dudes en decirme.

—Mn...

Viendo a su pequeño primo sentado sobre la cama y casi cubierto no tiene más que dejarlo sin antes darle una última mirada.

—Descansa, Qi Rong...

Luego de apagar la luz, la lámpara de noche es la que toma protagonismo, la luz que se dispersa es opaca como si intentara no molestar al invitado, pareciendo casi oscura.

En la oscuridad de la habitación un par de manos acarician suavemente el vientre que está cubierto por el camison de algodón, el toque es tan tímido que pareciera que la delicadeza con la que es acariciando podría siquiera causarle algún daño. Más un par de lágrimas caen sobre la ropa de dormir, se avecinan alertando al autor de todo ésto a cubrir su cuerpo en totalidad con las sábanas, limpiando así el líquido elemento con brusquedad.

Algunas horas después, al día siguiente...

Se escuchan algunas voces que provienen de la sala de estar, la paredes de la habitación no son muy gruesas como para poder aislarlo de todo lo acontecido fuera.

Pero la razón verdadera por la que siente y debe despertar es que tiene la urgente necesidad de ir al baño.

—Carajo...

Más ahora agradece que ya no sufre de mareos y vómitos intensos como hace meses atrás.

Se levanta y no se molesta en buscar las pantuflas, tampoco de tomar el camisón externo.

Abriendo así la puerta y dirigirse hacia el baño que está pasando el pasillo.

Como si no estuviera en sus cinco sentidos, y como si estuviera caminando sobre nubes, se dirige a paso lento a su objetivo y antes de poder tomar la perilla de la puerta puerta del baño una suave voz se escucha desde la izquierda.

—Joven maestro Qi Rong...

Mirando hacia el lugar de donde proviene el llamado puede ver se encuentran de pie cuatro personas que tienen sus ojos en él sin siquiera pestañear.

La voz de Shi Qing Xuan se hace presente con su característico ánimo y dulzura.

—Es un gusto volverlo a ver...

Es inevitablemente ignorado pues el joven con orejas doradas no muestra ningún gesto ni palabra, así dándose media vuelta entrando y cerrando con firmeza la puerta del baño dejando algo desconcertado al que lo saludó más no a los demás presentes ya sabiendo de la característica forma de ser del omega.

Lo interesante era que detrás de la puerta palabras soeces estaban siendo dichas en voz baja maldiciendo así el momento y a la vida.

No sabe si reír o llorar en este momento por la reacción de su primo y antes de poder decir alguna cosa, la voz de Shi Qing Xuan se escucha de nuevo con la misma suavidad de antes.

Un hilo rojo, una flor y mariposas. (HuaLian) (Au moderno) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora