Perspectiva Del Lector Omnisciente

Cosas que se Pueden Cambiar [2]

Mis acciones actuales no se debían a la enorme ética de la "humanidad" o la "justicia". Si enfrentaba a las personitas aquí, entonces perdería el logro que necesitaba para el final.

Esta era la única razón por la que ahora había clavado mi 'Espada de Fe' en el suelo.

[La 'Transmisión Estelar' ha detectado anomalías de tu parte.]

[Advertencia. Tenga cuidado de evitar ser hostil a otras catástrofes.]

[Si los actos hostiles se acumulan repetidamente...]

El polvo se levantó y los japoneses gritaron cuando perdieron la visión dentro del humo generado.

—¡Aaagh! ¿Qué está pasando ahora?

Fue un golpe lleno de poder considerable por lo que el polvo no bajó fácilmente.

[La Constelación de un pequeño planeta toca su pecho.]

Me sentí preocupado por un momento. Si los mataba con mis propias manos, podría obtener un nuevo escenario de inmediato.

Sin embargo, la pena por ello sería tremenda. Quería retrasar ese momento tanto como fuera posible. Por eso, al menos...

—Dokja, yo lo haré esta vez — Yoosung sacó una daga que le había dado Sanga y dio un paso adelante—. Me ocuparé de ambos.

—¿Puedes hacerlo?

—Sin problema.

Sanga la habría detenido, pero yo no era ella.

—No deberías pelear durante mucho tiempo —la animé—. ¿Escuchaste el mensaje de penalización hace un momento? Deberías manejarlos lo más rápido posible.

Mis opciones en este escenario serían más amplias si Yoosung pudiera tratar con ambas personas.

Tenía mucho que hacer en Tierra de Paz. Entre ellos, uno de los objetivos más importantes era atrapar la "serpiente" que había mencionado Perséfone. Si no recibía ninguna penalización por adelantado, entonces podría lograrlo antes de lo esperado.

—¿Qué bastardo hizo esto?

Yoosung corrió a través del polvo hacia donde se escuchó la voz. Casi al mismo tiempo, me escondí usando la 'Capa del Recluso'. No sería útil si tuvieran habilidades de detección de alto nivel, pero estos tipos no parecían tenerlas.

Un fuerte poder mágico surgió de la daga de Yoosung y se movió en un arco de media luna.

—¡Uwah!

Los japoneses pudieron librarse del polvo. Eso me hacía perder una oportunidad de oro pero había una manera de derrotarlos sin que yo peleara.

Se sorprendieron cuando la niña apareció entre el polvo.

—¿Qué, y esta pequeña?

—Niña —le hablaron las encarnaciones—, ¿por qué nos detienes?

—¿No sabes lo que pasará si haces esto?

Desafortunadamente para Yoosung, que no tenía la habilidad de 'Intérprete', le sonaba como un idioma extranjero.

—...¿Qué están diciendo?

Ahora el pueblo japonés se estaba dando cuenta de la situación.

—¿Eres de Corea del Sur?

—¡Ah, es cierto! Ya debe de haber entrado el primer grupo coreano...

—Maldita sea, ¿serán muchos...?

Su mirada se oscureció repentinamente.

—Niña, piérdete. No tenemos por qué pelear entre nosotros.