Eyes Colors ｢Albalia｣

Capítulo XXX

Me metí en el comedor agarré un bowl de frutas y me lo comí con la mirada de la morena clavada en mi.

Yo ignoré absolutamente su presencia.

En cuanto salí de allí me metí en las clases teóricas, y la morena cogió sitio a mi lado.

-¿Podemos hablar?-.

-A, ¿Ahora sí te interesa hablar? -Pregunté con tono enfadado. -No, no podemos hablar-.

Tras terminar las clases teóricas ignorando a la morena. Me acerqué hasta entrenamiento de poder, donde me puse el bañador y por encima el albornoz.

Me adentré en el ascensor y en cuanto se abrió la puerta, se pusieron todos los ojos sobre mí.

Caminé hasta los banquillos y abrí mi albornoz, dejando ver mi bañador de guepardo.

-¿Qué haces tú aquí? -Preguntó la morena. -No puedes bañarte aquí-.

-Si que puedo si. -Dije haciéndome una alta coleta-.

La aparté de mi camino, y caminé hacia el profesor de Aqua. Quién se alegró de verme en su clase.

Metí mis pies en la piscina y noté la mirada de la morena clavada en mi cuerpo.

-¿Me puedes iluminar los ojos?-.

-No, por lo que tengo entendido, solo puedo iluminar los ojos a Amarillo y el del resto de poderes solo se ponen cuando utilizo el poder-.

-De acuerdo. -Dijo el profesor. -Empecemos con algo sencillo. Vas a aprender a comunicarte con el agua-.

-¿Qué me comunique con el agua? -Pregunté levantando una ceja-.

-Así es. Tienes que poner la mano como los italianos. Así 🤌🏼 y ve girando la muñeca poco a poco, hasta dejar los dedos mirando al techo-.

El fue poniendo su mano en aquella posición y poco a poco se fue formando una especie de serpiente acuática.

-Ahora tú. Ese será tu primer ejercicio-.

El profesor se fue y yo me quedé sentada en la esquina de la piscina. Intentando mover una mínima gota de agua.

-Lo estás haciendo mal. Ve más despacio-.

Rodé los ojos y fui haciéndolo más despacio.

-No sabía que también eras aqua-.

-Por lo que se ve... Soy Totalis. Se supone que voy a tener todos los poderes. -Respondí seca-.

Se sentó a mi lado y frenó mi mano con la suya.

-Lenta. -Volvió a repetir moviendo mi mano con lentitud-.

Un poco de agua se movió bajo mi mano, haciendo que mis ojos se tornasen de color amarillo, rosa y Azul.

-Lo que viste ayer...-.

-Me da igual. -Corté su frase con un nudo en la garganta-.

-Pero yo..-.

-Tu, con todo tu coño dices que conmigo no, y con otros sí-.

-Pero no...-.

-Me da igual Natalia-.

-Lo nuestro es imposible, Alba-.

-¿Pero con el pavo ese no? No me toques el coño Natalia-.

-Tu eres princesa y además-.

-Y dale con que soy princesa. -Rodé los ojos. -Mira, cuando te des cuenta de que no pasa nada por tener lo que teníamos... Entonces hablamos, hasta entonces, lo mejor será que cada una vaya por su lado-.