Te amo,
de ello es testigo
mi taciturna conciencia.
Te queda claro como
siempre fue así.
Mi amor por ti
es inocente,
no sospecha maldad,
no conoce hastío,
ni vergüenza,
es decidido,
perenne y fuerte
ante la sombría mirada
del infortunio.
Que me dice que te
quedas en otra
casa,
vistiendo otras
paredes
acariciando otros
lunares,
contemplando otra risa.
Y yo no contesto.
Me guardo mis lágrimas.
Te imagino feliz.
-Conmigo o sin mí-
Y es todo
lo que necesito.
Creo que de eso se trata.
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Efímero
PoetryUn vuelo sin probabilidad de caída nunca será uno que merezca la pena abordar. Todos los derechos reservados. Obra registrada en www.safecreative.org Prohibida su reproducción total o parcial.
