Criaturas desafortunadas

Capítulo 2 : Renacido en un mundo de fuego.

El matrimonio entre Lady Rhea Royce y el príncipe Daemon Targaryen no se destacó por el amor entre ambos. En todo caso, apenas se toleraban, los rumores dicen que solo mentirían una vez al año, por eso muchos se sorprendieron de que Rhea Royce quedara embarazada. Las malas lenguas arengaron, como suele ocurrir, pero cuando la princesa Alyssa Targaryen nació en el año 103 d.C., con el cabello plateado de su padre y ojos bicolores como su abuela y su tocaya (aunque en colores diferentes), todos callaron. Especialmente porque el huevo de la princesa Alyssa, un regalo de su bisabuelo Jaehaerys, eclosionó apenas un mes después de haber sido colocado en su cuna.

En cuanto a su título, si Alyssa sería conocida como Dama o Princesa, Jaehaerys, el Sabio, decretó que los hijos de Daemon con su esposa, Rhea Royce, serían Príncipes y Princesas del reino, porque Daemon era el el siguiente en la fila después de Viserys y sus hijos.

Extracto de Los dragones del nuevo siglo , Maester Finwick.
ARYA

¡Había funcionado!

Y demasiado bien si el pequeño dragón en su cuna era una indicación.

Había reconocido a Nymeria inmediatamente. Aunque ahora era un dragón con escamas oscuras que recordaban más al color metálico del acero valyrio y con cuernos plateados y ojos de bronce fundido. El alma era la misma.

Aún así, funcionó.

Ahora ella era Lady Alyssa Targaryen. Hija de Rhea Royce y Daemon Targaryen. Dioses, apenas se toleraban el uno al otro, pero al menos a Daemon Targaryen le importaba.

Era algo que se decía en los libros de historia: Daemon era un buen padre. O al menos lo había estado con Rhaena y Baela. Ahora estaba siendo un buen padre para ella. Incluso si estaba a distancia, él había sido quien proporcionó dos guardianes de dragones para construir un pozo de dragones para Nymeria. Y él era quien la llevaría a volar incluso cuando era un bebé para que se acostumbrara a la sensación.

La llevó a Kingslanding cuando tenía dos meses para presentársela a su bisabuelo moribundo. Y la llevaba allí una vez al año para que ella y su prima, Rhaenyra, pudieran tener una buena relación.

"¿Quieres llamar a tu dragón Nymeria?" Daemon le preguntó mientras estaba en sus brazos.

"¡Nymeria es el nombre de una princesa guerrera! Perfecto para Nymeria", dijo infantilmente señalando al dragón que estaba montado sobre la cabeza de Caraxes para disgusto del dragón mayor.

"Entonces es Nymeria", se burló Daemon.

Eso fue cuando tenía un año y Nymeria tenía el tamaño de un gato doméstico. Ahora Nymeria era casi manejable, del tamaño de un caballo, y Daemon aparecía de vez en cuando, para enseñarle los conceptos básicos de volar. Hoy le dejó el control de las riendas por primera vez.

Cuando aterrizaron, riéndose la una de la otra, apareció su madre, su nueva madre, Rhea, con un vestido de día tan sencillo como el que usaba cuando era la pequeña Arya Stark. Estaba encima de su caballo y fuera del torreón. "¿Qué es?"

"La septa Harley fue a quejarse de que alguien sacó a Alyssa de sus clases. Vi a Caraxes e hice una buena suposición", Arya observó cómo Daemon ponía los ojos en blanco hacia su madre.

"Rara vez vengo aquí, Rhea, creo que tengo más derecho al tiempo de mi hija que a su Septa".

"Lo sé, agradecería un poco de advertencia cuando lleves a Alyssa porque Willam estuvo tan cerca de llamar a un grupo de búsqueda", los ojos de Daemon se pusieron en blanco de nuevo.

"No tendrás miedo de que alguien secuestrara a Alyssa, ¿verdad?"

"No, solo que Alyssa está empezando a sentir tanta curiosidad como yo antes y se ha dedicado a explorar Runestone sin sus guardias. Es sólo cuestión de tiempo antes de que algún día decida que quiere explorar el exterior de la fortaleza", los ojos de Daemon miraron de Rhea a ella, y Arya hizo un puchero ante el ligero castigo de su madre.