🌹 isabella
20-12-2024
suspiro una vez más para tratar de calmarme y no estresarme rápido,estoy terminando de armar una valija para viajar en menos de 24 horas.
mañana sale nuestro vuelo a argentina para pasar navidad y año nuevo,con la familia de Agustín.
–¡Lula,vení acá!–corro a mi perrita porque me agarró una remera.–eso no se hace mi amor–me agacho como puedo y alzo a la perrita.
si,tenemos una perrita.agustín se encaprichó con que quería una perrita y así lo hizo,es de raza golden.
–a tu papá lo voy a matar,ni siquiera empezó a armar su valija–le hablo a la perra,como si ella entendiera.
la baje y seguí armando la valija.
ayer terminamos de organizar bien la habitación de Ciro,quedó hermosa.yo cuando la ví no lo podia creer.
–¡amor,llegué!–se escucha el grito de agus desde el piso de abajo.
–¡estoy arriba!–le devuelvo el grito y enseguida se escuchan sus pasos hasta acá.
–que desastre,amor–se acerca y me da un beso.
–ya se,estoy armando las valijas–doblo y guardo ropa.
–yo tengo que hacer la mía todavía–suspira.
–ni siquiera una remera,nada guardaste–me río de su frustración–otra cosa,fíjate que tú hija andaba jugando con tus ojotas–acuso a nuestra hija perruna.
ya no es la primera vez que le rompe las ojotas,pero bueno,Lula no hace nada.
–no amor,otra vez–se queja y va a ver las ojotas.
–agua y ajo–le respondo para cerrar la valija.
–Lula,vení–llama a su hija.
Lula entra con cara de tristeza,sabe que rompió otra vez las ojotas.
–hija,es el tercer par de ojotas que rompes,ya te dije que eso no se hace–chista y yo trato de no reírme.
se hace el malo y después llora cuando a Lula le tienen que poner la vacuna.
–no,nada de llorar–la señala y Lula se sigue haciendo la pobrecita.
–mi chiquita,que le hacen–le hablo y ella se acerca a mi–no tenés que hacer eso,papá se enoja–la alzo y agus me mira.
estamos en la recta final del embarazo y odia todo tipo de fuerza que yo hago porque después me quejo del dolor de cintura.
–bajala–me mira serio y Lula le ladra–no la defiendas Lu,bajate que mamá no puede hacer fuerza–la agarra a upa él.
–bájame una valija de allá–señalo la parte más alta del estante que tiene el vestidor.
–¿para qué?–pregunta confundido.
–para ir preparándote la valija,yo no me voy a levantar a las tres de la mañana a ayudarte–le digo yendo a ver qué le iba a poner en la valija.